El gobierno chino inauguró el miércoles la línea férrea de alta velocidad más larga del mundo, con lo que se reducirá a menos de la mitad el tiempo necesario para viajar desde la capital china en el norte a Guangzhou, un importante centro económico en el sur.

La inauguración de la línea de 2.298 kilómetros se conmemoró con la salida de un tren de Beijing a Guangzhou, a las 9:00 de la mañana. Una hora después, otro tren salió de Guangzhou hacia la capital del país. Sin embargo, este último llegó a su destino con una hora de retraso debido al hielo y la nieve.

Según informaron los periodistas del diario South China Morning Post que viajaban a bordo del tren, éste llegó a la Estación Sur de Beijing a las 6:55 p.m. hora local (5:55 a.m. en Perú) tras nueve horas de viaje, una más de lo previsto.

Debido a las bajas temperaturas en el norte del país (hasta 17 grados bajo cero en Beijing) el tren ralentizó en muchos tramos su velocidad punta de 300 km/h por precaución y aceleró hasta velocidades próximas a los 310 km/h en otros tramos.

En cambio, el primer tren en destino contrario, de Beijing a Guangzhou, partió de la capital una hora antes, a las 9 de la mañana hora local y llegó a su destino sin contratiempos, tras 7 horas y 59 minutos de viaje.