ENRIQUE VERA @kiquevera Redacción online
Dice que es un pertinaz luchador social surgido de las denominadas autodefensas de Colombia, que nunca ha utilizado una pistola y que llegó al Perú para hacer turismo. Pero la pista que siguieron los agentes de la Dirección contra el Terrorismo de la PNP para ponerle el guante a Jacinto Nicolás Fuentes Germán, alias ‘Don Leo’, estaba cubierta de una sangrienta estela de terror y muerte signada por su apetito irrefrenable de dominio y fortuna.
El cabecilla de los sanguinarios ‘Urabeños’ del Bajo Cauca cruzó la frontera con Ecuador el pasado 21 de enero, gracias a la cédula de identidad y tarjeta andina de su hermano Andrés. La tarea fijada iba a mantenerlo ocupado varios días en Lima: acopiar armas para su organización criminal.
‘Don Leo’ y Los ‘Urabeños’ conforman una de las bandas que tras el desarme paramilitar en Colombia sellaron alianzas narcoterroristas con las FARC para controlar el tráfico de drogas. Otras de similar brutalidad en sus operaciones son ‘Los Rastrojos’ y ‘Los Paisas’. En suma, lo que en tierras cafeteras es catalogado como ‘concierto para delinquir’ aquí se denomina terrorismo y va desde el narcotráfico hasta la extorsión o asesinatos masivos.
Así, ‘Don Leo’ estableció un cruento aunque endeble vínculo con el frente 33 de las FARC que en los últimos años casi les había dado el control del Cauca, y a nivel internacional una continua coordinación e intercambio con cárteles mexicanos, principalmente.
MUERTE POR EL ORO Sindicado de perpetrar y ordenar al menos medio millar de homicidios, el gobierno colombiano había ofrecido 100 millones de pesos por su cabeza, pero la mente de Fuentes Germán quizá ya no estaba tan al pendiente del acoso policial-militar. Por lo menos, no tanto como para descuidar la creciente y feroz pugna delictiva que se ha desatado en el Cauca, epicentro de la producción de oro en Antioquia.
“Él no lo va a aceptar, pero está claro para nosotros que vino a llevar armas porque está en guerra en el Cauca. Eran aliados con las FARC pero ahora hay una fuerte disputa por el dominio del oro. Y esa lucha también ha llevado a que los ‘Urabeños’ tengan en la mira a los ‘Rastrojos’, enemigos por la prioridad en el territorio”, dijo a elcomercio.pe el comandante Max Anhuamán de la Dircote, que participó en la captura de quien afirma era uno de los 50 criminales más buscados en Colombia.
Aunque se trata de una antigua discordia, la minería se ha vuelto desde hace unos cinco años el fruto en dulce para las organizaciones siniestras y así lo describió a elcomercio.pe el periodista Juan Sebastián Jiménez del diario “El Espectador” de Colombia, especialista en el tema: “El Bajo Cauca es una zona muy importante para la criminalidad. Hay muchas minas ahí y funciona como un corredor estratégico hacia sectores de narcotráfico o a los puertos para sacar el producto. Esta zona ha estado en constante disputa por los ‘Urabeños’ y los ‘Rastrojos’, lo que ocurre es que estos últimos se han debilitado con las capturas de sus jefes y ahora los primeros quieren aprovechar la situación”.
Ya sea bajo el allanamiento de minas o la extorsión a empresarios mineros, las bandas prácticamente han sitiado el negocio en Antioquia, pero ese mismo afán ha hecho incluso que sus relaciones con los frentes de las FARC se rompan. “Nunca fueron vínculos fuertes, sino alianzas para el negocio y mientras este se mantenga. Puede que los narcos se encarguen del cultivo de coca y las bandas del tráfico o, en la minería, que los narcos cuiden las minas mientras las organizaciones criminales se ocupen de la infraestructura. Después se rompe esta unidad. Hay una violencia extremada entre los mismos criminales porque también está la recomposición delincuencial y del mismo narcotráfico. Hoy existen nuevas rutas hacia EE.UU., Europa y además se han fortalecido las narcorutas internas”, explicó el periodista.
ARMAS EN PERÚ Antes de llegar a Lima, ‘Don Leo’ estuvo unos días en Guayaquil. Desde ahí se trasladó a Miraflores y rentó el departamento 302 de una residencial situada en la avenida 28 de Julio por US$1200 mensuales. Junto con su esposa, hija y cuñado vivió en ese inmueble 17 días. Ayer cayó a las 7:25 p.m. cuando terminaba de hacer ejercicios.
En diálogo con elcomercio.pe, el comandante Anhuamán detalló: “‘Don Leo’ pretendía usar para su vuelta una línea de tráfico de armas que seguía las FARC, es decir, Lima-Tumbes-Guayaquil-Colombia. Eso arroja hasta ahora nuestra investigación. Somos parte de la Red Internacional Antiterrorista que nos permite el intercambio de información de inteligencia para casos de terrorismo, narcotráfico y crimen organizado”.
Parte de las pericias actuales que involucran al salvaje hampón colombiano apuntan a discernir bajo qué modalidad iba a obtener las armas, propósito que la misma Dirección de la Policía colombiana ya confirmó esta mañana.
“De aquí han salido para las FARC misiles antiaéreos, hace un año agarramos al principal abastecedor de las FARC que es un ecuatoriano y a todo una red de policías y militares en actividad por ese ilícito. El Perú está abasteciendo de muchas armas, con decirle que hace un mes las FARC dispararon un misil antiaéreo proveniente del Perú, esa es la realidad de las cosas”, acotó el oficial.
La Policía Nacional del Perú alista la expulsión de Jacinto Nicolás Fuentes a Colombia, donde está requisitoriado por múltiples delitos, pues ingresó de manera ilegal al país. Es probable que en los próximos días una comitiva de agentes colombianos llegue al Perú y se lo lleve. Con ello, el nivel de la guerra interna por el oro en el Cauca habría quedado en igualdad de condiciones para ‘Urabeños’ y ‘Rastrojos’, pero la sombra de horror allá continúa.