Una forma económica de renovar el dormitorio de tu pequeño es cambiando el color de los muros. Emplea látex satinado para darle a la pared un ligero brillo. El galón cuesta cerca de S/25 y rinde para 40 m2. Lo adquieres en tiendas ferreteras.
La arquitecta Olenka Marquina señala que en un dormitorio de niña es posible usar como acento -sobre un fondo blanco- los tonos rosado, morado, turquesa o coral. En el caso de los varones, predomina el azul y sus derivados combinados con gris. Si el cuarto tiene buena iluminación natural, apuesta por el blanco y el negro para imprimirle un atmósfera contemporánea. Dale color al muro principal con pintura de pizarra negra, así, además, podrán dibujar sobre él. El galón cuesta S/44.
Asimismo, puedes otorgarle movimiento a las paredes del dormitorio pintando estrellas o círculos usando esténciles, látex y un pincel delgado. En Internet encontrarás páginas gratuitas donde descargar plantillas, como www.shapesource.com.
Más opciones
La interiorista de Möb, Andrea de la Torre, señala que puedes refrescar el aspecto a una cómoda clásica, dándole un acabado al duco (este servicio cuesta, alrededor, de S/120) y reemplazando los tiradores por unos de diseño moderno (una perilla de cromo de 30 mm cuesta S/5,70) o de diseño infantil. Incluso cambiar las patas talladas por unas cónicas o rectas y pintarlas del tono de acento que tenga la habitación.
Si no cuenta con una cabecera, la arquitecta Carla Cruz sugiere hacer una con washitape. Esta cinta adhesiva viene en varios colores y diseños (puntos, rayas, zigzag, figuras geométricas). Si el muro principal del dormitorio es de un tono neutro, usa cintas de un matiz intenso (negro, azul, morado); de primar los colores oscuros, opta por las tonalidades claros para que destaquen.