Si ataque la selección chilena fue demoledora, en defensa también respondió. A diferencia de lo sucedido frente a Panamá, esta vez Claudio Bravo respondió cada vez que fue requerido.
La jugada se dio cuando se disputaba el primer minuto de descuento. Carlos Sánchez tomó el balón y probó de media distancia. Fue un buen remate que Bravo desvió con la mano izquierda luego de lanzarse.
El peligro no pasó y de inmediato llegó un centro a media altura de Juan Guillermo Cuadrado. Claudio Bravo nuevamente intervino y desvió la pelota con mano cambiada. El balón cayó en los pies de Fabra, quien mandó otro centro, el cual terminó en los guantes del arquero de la selección chilena. Todo sucedió en 10 segundos.
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