Canadá sueña con su primera final de NBA con Raptors de Toronto

Desde la fundación de los Raptors de Toronto y de los Grizzlies de Vancouver (mudaron la franquicia a Memphis en 2000) en 1995, ningún equipo canadiense nunca estuvo tan cerca de llegar a una final de la NBA, especialmente ahora, tras la espectacular victoria de los primeros la noche de ayer en el Air Canada Centre sobre los poderosos Cavaliers de LeBron James, igualando la serie de finales de Conferencia del Este en 2-2.

Los bases DeMar DeRozan y Kyle Lowry lograron entre ellos 67 de los 105 puntos conseguidos por el quinteto que dirige Dwane Casey. Ambos jugadores se mostraron imparables en la NBA, principalmente Lowry, quien mostró una efectividad impresionante (14 canastas en 20 intentos) y un arranque y freno brutales que dejaban sin chance a sus oponentes. Kyle lideró a su equipo en el tramo final del partido con decisiones de súper estrella para cerrar el juego con una racha de once puntos contra tres y terminar imponiéndose 105-99.

Los Raptors dominaron los dos primeros cuartos y se fueron al descanso con ventaja de 57-41. El conjunto visitante equivocó los caminos hacia la canasta, abusando del lanzamiento desde fuera del perímetro, mostrando una efectividad bastante pobre en la primera mitad. Kevin Love y J.R. Smith estuvieron irreconocibles en los intentos a distancia, falencia que se vio reflejada en el marcador.

Sin embargo, en el tercer período, despertó el cuadro de Ohio (había ganado diez partidos seguidos de playoffs antes de pisar Canadá). Liderado por el gran LeBron, mostró consistencia en el juego y se adueñó del partido, ejecutando jugadas con mayores variantes y -ahora sí- respondiendo desde Saturno (como diría el relator dominicano de ESPN, Ernesto Jerez) con tres triples consecutivos del francotirador Channing Frye y de las buenas decisiones de James, que supo manejar los tiempos del partido.

Tras estar 16 puntos abajo, se pusieron tres arriba en el último cuarto. Los comentaristas de la transmisión en los Estados Unidos ya hablaban de la calidad y de la experiencia de los Cavs, cuando los Raptors reaccionaron cual equipo con varios galones en la NBA, apareciendo otra figura que influyó decisivamente en el comeback de Toronto: Bismack Biyombo.

El congolés de 23 años y 2 metros y 7 centímetros se hizo impenetrable en la pintura y bajó una cantidad importantísima de rebotes (14) los que, sumados a los 26 del tercer juego le dieron un total de 40 rebotes en los dos últimos duelos: TREMENDO.
DeRozan y Lowry demostaron ser jugadores con mucha confianza; la pelota no les ‘quema’ cuando el partido los requiere. Anoche se enfrentaron a LeBron sin ninguna presión y sin ningún pánico escénico a la serie de playoffs más importante de su carrera.

Lejos han quedado los buenos tiempos de Vince Carter y de Chris Bosch (los mejores jugadores de la historia de la franquicia). Estos Raptors nunca habían estado siquiera en una final de Conferencia y hoy responden por todo lo alto.

Ahora les toca volar hasta Cleveland, pisar el Quicken Loans Arena, un coliseo que estará explotando y donde se aguarda, con impaciencia y con la sangre en el ojo, la presencia de estos Raptors que este miércoles a la noche tienen una cita con la historia. De ganar, quedarían a un solo juego de coronarse en el Este. 

El plantel solo cuenta con un jugador nacido en Canadá, Cory Joseph, pero el país entero festeja y sueña con lograr algo que al inicio de la temporada parecía bastante lejano e improbable, llegar a la gran final de la NBA.

No lo descarte, Cleveland es el favorito pero estos jóvenes Raptors pueden dar la campanada. Calificación del próximo partido: Imperdible.

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