Como en el 2012, Robby Gordon se volvió a ganar todas las palmas del público. Su ánimo polémico ha generado empatía con el público y más si regala espectáculos como el gran salto sobre la rampa.

El piloto de la Hummer quiere ganar su primer Dakar, luego de que en la edición anterior fuera expulsado por disconformidades técnicas. Vamos a tratar de ganar. El año pasado corrimos bien y creo que vamos a ir bien. Es muy competitiva esta edición, afirmó el estadounidense.

Como ya es costumbre en él, hizo su tradicional salto sobre la rampa. Primero subió al podio, tomó las medidas necesarias y tomó vuelo para hacerlo.

Y como no podía ser de otra manera, en su Hummer había un sticker que decía Yo amo las Mini porque me gustan las chicas, con lo que recordó lo que dijo en el 2012, cuando aseguró que esos coches eran para mujeres.

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