DAVID HIDALGO JIMÉNEZ @DavidsCreator Redacción online

Las palmas de reconocimiento a la entrega de la selección peruana Sub 20 dejarán de sonar esta semana, y así como se apagó la ilusión en el Sudamericano, así también podría apagarse la luz que dejaron estos jugadores. La pregunta se cae de madura: ¿Qué pasará con esta selección Sub 20?

Sergio Markarián ya se apuró en decir que los Sub 20 “tendrán que esperar”, y solo “si hacen méritos, se les va a convocar para los procesos de la selección juvenil que estoy haciendo”. Eso lo dijo ayer en la Videna. Ergo, por ahora no tienen cabida en la selección adulta.

Quiere decir que Cristian Benavente, Yordy Reyna, Edison Flores, Hernán Hinostroza, Alexis Gómez y un grupo más de seleccionables quedarán abandonados a su suerte. Peor aún, la mayoría no es titular en su equipo. ¿Pasarán al olvido como la generación de los ‘Jotitas’? Eso solo lo saben Manuel Burga, Sergio Markarián y Carlos Picerni.

¿PLANIFICACIÓN O IMPROVISACIÓN? Manuel Burga no puede hinchar el pecho y llenarse la boca en decir que existe una mejora deportiva producto de la planificación en el trabajo de menores. Se sabe que la mayoría de estos jugadores de la Sub 20 consiguieron tener continuidad en Primera División ‘gracias’ a la crisis económica que sufrieron los grandes como Universitario y Alianza Lima, clubes que se vieron obligados a echar mano de sus canteras para completar sus equipos. Esa es la cruda y dura realidad.

La Unidad Técnica de Menores de Carlos Picerni en la FPF no realiza un trabajo planificado con la selección de mayores. Si así fuera, Markarián tendría que convocar a la base del equipo de Ahmed para que sea el ‘sparring’ oficial de la selección adulta que juega las Eliminatorias Brasil 2014. Solo así se tendría garantizada la presencia de los internacionales Benavente (Real Madrid Castilla de España), Flores (Villarreal B de España), Hinostroza (SV Zulte Waregem de Bélgica) o Deza (MSK Zilina de Eslovaquia).

No se pide que jueguen las Eliminatorias, solo importa que respiren camarín junto a los consagrados Paolo Guerrero, Claudio Pizarro, Jefferson Farfán, Juan Manuel Vargas o Alberto Rodríguez. La idea es que si los chicos son llamados alguna vez por Sergio Markarián al plantel mayor, ya sea por mérito o por el clamor popular, no se sientan como extraños en el vestuario.

La selección paraguaya del ‘Tata’ Martino llevó al plantel juvenil al Mundial de Sudáfrica 2010 para que conviva con el plantel adulto. Y eso lo sabe muy bien Carlos Picerni porque estuvo a cargo de aquel grupo en el país africano. La selección de Argentina también tiene la sana costumbre de sumar chicos al plantel mayor que lideran Lionel Messi, el ‘Pipita’ Higuaín y el ‘Kun’ Agüero. También pasó con el Chile de Marcelo Bielsa y Claudio Borghi.

Cualquier muestra de afecto, sano consejo, o estar en un partido de práctica junto a los ‘cracks’ que solo pudieron ver por TV tiene un significado muy valioso para los jugadores de menores. Y eso lo sabe muy bien la gente que está ligada al fútbol.

La realidad es que Markarián prefiere que la selección mayor solo trabaje en privado, y solo pide a los de la Sub 20 cuando necesita realizar algún trabajo táctico específico. Es más, cuando el grupo de Pizarro, Guerrero, Farfán y compañía trabaja, los planteles de menores deben entrenar en otros campos deportivos lejos de la Videna de San Luis.