Argentina: un rival quebrado que deambula por las Eliminatorias

Años atrás enfrentar a Argentina, sea en la plaza que sea, era sinónimo de peligro. El conjunto albiceleste llevaba consigo grandes figuras que podían ganar un partido al instante. Con el pasar del tiempo ese sello se fue borrando por culpa de un mal manejo interno que llegó a repercutir en el sentimiento de todos los deportistas. Ni siquiera Lionel Messi ha podido sacar adelante a los suyos. Encima carga la pesada cruz de los más de 31 años de sequía ganadora de una Copa del Mundo. Algo que sí logró Diego Maradona, con quien lo comparan durante todos los días de su vida.

El rendimiento de este seleccionado es tan preocupante que está a un paso de quedar eliminados de la clasificación a una cita mundialista. Nadie puede concebir esta idea. Tienen a jugadores maravillosos, con grandes cualidades. Pero una vez que todos ellos se juntan en el verde, las cosas salen mal. La mística se fue sin dar explicaciones. Hoy todo es un camino lleno de claroscuros, que no permite divisar un final preciso.

“En el último tiempo hubo muchos cambios de técnico y eso hizo que el equipo perdiera una identidad. Hubo cambios de estilo futbolístico y eso también conspiró contra la estabilidad del equipo”, apuntó Gustavo Yarroch, periodista del Diario La Nación de Argentina, en declaraciones con DT El Comercio.

Para Gustavo otro aspecto que caló hondo en el espíritu del elenco gaucho fueron las constantes derrotas en instancias decisivas de campeonatos trascendentales. Todo esto provocó que el jugador entrara en una especie de trauma, el cual no lo deja en paz. Sombras nada más.

“Es evidente que los futbolistas tienen una carga psicológica derivada del hecho de haber perdido tres finales: la del Mundial de Brasil y la de las últimas dos Copas América. Pablo Zabaleta, ex integrante de la Selección, lo reconoció sin dobleces”, afirmó.

Otro que comparte la postura de Yarroch es Hernán Claus. El editor del diario Olé consideró que los nuevos futbolistas están nublados por los constantes fiascos deportivos. A esto, hay que agregarle que la carencia de títulos los abruma. Las críticas de los espectadores son ácidas y dolorosas.

“Hay un bloqueo por las finales perdidas, por la cantidad de años que la Selección no gana un título en la Mayor. Esta camada de jugadores, que ha mostrado un gran sentido de pertenencia, sienten una gran presión y eso les juega en contra”, subrayó.

Aunque, Claus siente que esta nube negra que persigue a Messi y compañía podría disiparse un poco si es que consigue su boleto a Rusia 2018. “Argentina se encuentra en un eterno momento de transición que hace que hoy se encuentre en crisis. Necesita clasificar al Mundial para enderezar el barco”, enfatizó.

Esa nave fastuosa que transita por un río caudaloso de Eliminatorias tendrá que eludir un iceberg que, a simple vista, es pequeño, pero en el fondo cuenta con un bloque gigante difícil de quebrar. Ese obstáculo colosal es el renacido Perú. Un rival que siempre ha brindado espectáculos sensacionales en cualquier época. Derrotarlo no será misión sencilla, pero el ‘Hombrecito’ mandará a sus mejores gladiadores.

¿Cómo formará Argentina en su último partido de local?

Argentina se despide de su público fervoroso en las Eliminatorias Rusia 2018 ante la renovada selección peruana. Por tal motivo, Jorge Sampaoli buscará alinear un equipo que pueda darle una alegría extensa a los suyos. El gran problema es que ni él mismo se convence por un esquema. Quizás la presencia de tanta estrella hace que la galaxia se comprima. Sinceramente sus pensamientos son todo un enigma.

“Viendo a los equipos de Sampaoli, me parece que el esquema de tres defensores es el que él cree como el que mejor le puede rendir. Lo ha demostrado mientras ha sido entrenador de la U de Chile como de la selección chilena y también de Sevilla. En Argentina, creo yo, lo va a implementar. Lleva poco tiempo, pero si se confirma el equipo que creemos para mañana, tenemos a Acuña, casi, figurando como lateral izquierdo en una defensa de cuatro. Si bien Acuña no es lateral, la idea es que arranque ahí”, dijo Agustín Fantasía, periodista de TyC Sports.

El propio Agustín nos hace ver que Sampaoli es una caja de sorpresas, pues en una hora tiene clavada la idea de los tres defensores, pero en la siguiente decide inclinarse por la clásica línea de cuatro. Nadie puede entender los códigos extravagantes de Jorge. Aunque, no causaría impresión que en el último suspiro se quede con sus famosos stoppers y líbero.

“Con Sampaoli, la verdad, es imposible adivinar. Creo que Romero será el arquero. Va a sostener la línea de tres con Fazio o Mascherano, con Otamendi y Mercado como stoppers. Me parece que van a jugar Salvio y Di María por los costados. Con dos internos: uno será Enzo Pérez y el otro Gago o Banega y Biglia como central un poco retrasado. Y después con Messi e Icardi”, comenta con duda Walter Safarian, reconocido hombre de prensa de la cadena FOX Sports.

Al margen del número de soldados defensivos, otro sector que no tiene dueño fijo es la zona del ‘9’. Mauro Icardi vive un momento gratificante en Italia. Sus goles cautivan en las jornadas atractivas de la Serie A. Pero su momento en Argentina es distinto, puesto que recién está construyendo su edifico con láminas albicelestes. Por esa razón quién tendría la responsabilidad goleadora sería Darío Benedetto.

El ‘Pipa’, como lo conocen por allá, es un aguerrido artillero que jamás deja una pelota muerta en el área. Es todo un killer que se alimenta de las arengas de los aficionados y del nerviosismo del oponente. Este futbolista sería la carta maestra de Sampaoli.

“Benedetto tiene una muy buena actualidad. Benedetto lleva en 37 partidos 32 goles. Creo que la estadística es esa, exactamente la que me contaba Silvio Maverino. Icardi no ha marcado un gol en los dos partidos que ha jugado en la selección contra Uruguay y Venezuela. No pudo contra Uruguay y contra Venezuela tuvo dos situaciones y no pudo marcar. Entonces es por eso y porque se juega en la cancha de Boca. Por eso un gran sector de la prensa le pide públicamente al técnico que juegue Darío Benedetto”, explicó Safarian.

Pero para Fantasía, ni el hombre de Boca Juniors ni el del Inter son los atacantes por excelencia que necesita Argentina en estas circunstancias claves. Su candidato es y sigue siendo el ‘Pipita’.
“Benedetto está pasando por un momento bárbaro. Tal vez eso nos sirva. Pero creo que Icardi es un delantero fenomenal. Para mí el ´´9´´ de la selección debe ser Higuaín porque lo ha demostrado. Se ha cansado de hacer goles con la camiseta de la selección. Creo que es injusto que no figure en la nómina argentina”, argumentó.


Sea el famoso 3-3-3-1 o 4-2-3-1, siendo este último el que toma mayor fuerza en las horas finales, hay un solo futbolista que podría echar estos planeamientos a un lado con solo un poco de su magia infinita: ese es Lionel Messi.

Lionel Messi: el incomprendido de otro planeta

Leo es señalado como el culpable de todas las desgracias de Argentina. No existen motivos que sustenten ese enunciado, pero para los simpatizantes el solo hecho que haga más goles en Barcelona que en su propia tierra es algo inconcebible. Y eso que es el artillero histórico de la albiceleste. Igual eso no les importa. Probablemente la carencia de títulos hace que miren a Messi con decepción y lo critiquen a más no poder.

“Messi es el mejor del mundo y nunca se ha armado un equipo para jugar con él. Siempre se pensó en otra cosa o se equivocaron en el armado del equipo. Y el gran error es siempre compararlo con Maradona. Él fue otro tipo de jugador. También el mejor jugador del mundo en su época. Messi es el mejor del mundo ahora y el equipo tiene que rondar con él”, fueron las palabras de Emiliano Pinson, integrante de FOX Sports, en apoyo a ‘La Pulga’.

Gustavo Yarroch también se une a la defensa de Pinson. Aunque añade un detalle puntual que, quizás, genera que la prensa le tenga antipatía a Lionel. “Lo critican por dos motivos, injustamente para mí: porque no ganó ningún título de mayores con Argentina y porque son contadas las veces en las que concede entrevistas individuales”, especificó.

Recordemos que la convivencia de Leo con la prensa no es la mejor de todas. En Barcelona no mantiene un cruce fluido con los medios. Ni que decir en Argentina, en donde ahora todos guardan silencio absoluto por medidas de resguardo. “Todas las opiniones son respetables. Para mí, Messi es la bandera de la Selección y el jugador más importante del fútbol argentino en los últimos diez años”, razonó Claus.

En el país argentino el amor por Messi está dividido. Algunos lo consideran pieza gravitante en cualquier tipo de once. Otros creen que su presencia hace que el equipo viva de él y de sus movimientos. A eso podríamos llamarlo una ‘Messidependencia’. Aunque, Walter Safarian está en contra de este término mal utilizado.

“A ver, ‘Messidependencia’ no. Sí, Messi es muy importante. De hecho cuando Messi no estuvo el equipo argentino no pudo ganar o le costó. Es muy importante Messi. Lo que pasa es uno siempre busca comparaciones y cuando uno dice ‘el seleccionado de Maradona fue dependiente y dicen no y otros sí’. Para mí no, porque estuvo rodeado de un gran equipo con buenos jugadores. La Argentina está dividida, porque está el que dice que es ‘Messidependiente’ y sin Messi es un equipo más; y está el que sostiene que el seleccionado argentino es un equipo que tiene buenos jugadores y una buena cantidad de jugadores con experiencia, pero que dependen de Messi. Para mí no es el seleccionado ‘Messidependiente’. Pero para la mayoría sí”, justificó.

Definitivamente nadie está conforme con nada. En Perú cuánto agradaría tener a alguien que tenga, aunque sea, el 45% de las virtudes que posee Lionel. Y en Argentina cuánto agradaría sostener un equipo sólido como el incaico. Incongruencias que solo se ven en el fútbol. Lo cierto es que Messi le pertenece a ellos y con tan solo un par de despliegues puede sepultar a los de Gareca en un instante. Solo que eso les parece poco probable porque poco a poco han dejado de creer en su máximo exponente. Quizás, a partir de ahí, Perú parte como favorito.

¿Qué significaría no vencer a Perú con todo a favor?

Perú ha dejado de ser ese rival timorato que era presa fácil para todos. Con el pasar del tiempo, la bicolor confió en sus capacidades y se contagió de la paciencia de Ricardo Gareca. Por el contrario, Argentina es un plantel tocado de nervios que se resiente con facilidad cuando escucha algún reproche. En caso que no obtengan los tres puntos en el feudo de Boca, los ataques verbales aumentarán como una ola desenfrenada que solo buscará llevarse lo que encuentre a su paso. En pocas palabras, sería una hecatombe de proporciones inimaginables para este nuevo milenio.

“Dependerá de los otros resultados. Pero está claro que no ganarle a Perú sería otro paso atrás para una Selección que viene muy golpeada en el último tiempo”, expresó con firmeza Claus.

Sin embargo, Yarroch no comparte con exactitud la vertiente explicada. El significado de un verdadero desastre “si Argentina queda afuera del Mundial. Eso sí sería una hecatombe futbolística”, concluyó.

En un hipotético escenario que Argentina le diga adiós a Rusia, Emiliano Pinson reconoce que cada connacional tiene parte de la culpa. Aunque la escala mayor se la lleva el grupo conformado por la AFA.

“Culpables hay muchos. Todos tienen una cuota aparte. La dirigencia de AFA que fue un desastre en este periodo de eliminatorias, los entrenadores, los jugadores, parte de la prensa también. Pero fundamentalmente el porcentaje más alto lo tiene la dirigencia. Durante mucho tiempo manejó muy mal el destino de la selección. Las decisiones que tomaron fueron erróneas en gran parte”, sentenció.

El destino será el único en definir lo que le pasará a esta herida Argentina que apelará al poderío individual de sus representantes. Ellos saben plenamente que se juegan su clasificación ante Perú, aquel rival que fue su verdugo en el camino en México 70’ y aquel que estuvo a segundos de privarlo del campeonato mundial del 86’. La blanquirroja será el juez que dictaminará la sentencia de la nación del sur en los próximos 90 minutos en la corte de La Bombonera. Y nosotros tendremos un lugar privilegiado -en cualquier parte del mundo- para ser testigos de tamaño caso.