CHRISTIAN CRUZ @cruzva_DT

Fueron 90 minutos de silencio para este triste final de Eliminatorias. Lamentable cierre para la selección peruana con un 1-1 ante Bolivia en un vacío Estadio Nacional. El lamento culminó esta noche, con cada pase errado, con los nervios de Penny, con la falta de definición de Carrillo y la ausencia de Vargas, y más. Pero también queda el entusiasmo por el juego de Benavente, por el atrevimiento de Reyna y el empuje de Zambrano.

La ilusión de una despedida digna en casa la dio el gol de Yotún al minuto 19. Pero se fue desvaneciendo con cada gol errado. Uno de Vargas, otro de Zambrano y el palo de Benavente, previo penal no cobrado por una mano dentro del área. Y se terminó con el empate de Bejarano en el minuto 46, tras un rebote dejado por Diego Penny.

Sin Benavente en el segundo tiempo, salió por lesión, las ideas se quedaron en el camerín peruano. Ni Lobatón ni Vargas, ni Pizarro, mucho menos el ingresado Carrillo fueron capaces de generar algo que se parezca a fútbol para Perú. Por el contrario, daba la impresión que en cualquier contragolpe los bolivianos daban el golpe y lo ganaban.

No llegó el gol boliviano, mucho menos el peruano, que pudo ser con el palo que tiró Reyna. Enredados, peleados consigo mismo, así acabaron las Eliminatorias para Perú.

Es el final, quedará mucho por replantear. Crear en el Perú más Benaventes y potenciar los Reynas. Falta mucho, y siempre nos quedará menos tiempo.