Jean-Claude Junker ha indicado que se someterá a todas las investigaciones sobre el caso que lo compromete. (Foto: Getty Images)
Jean-Claude Junker ha indicado que se someterá a todas las investigaciones sobre el caso que lo compromete. (Foto: Getty Images)

A tan solo seis das de haber asumido la presidencia de la Comisin Europea (el rgano ejecutivo de la Unin Europea), un escndalo le estall en la cara a Jean-Claude Junker. Y es que el ex primer ministro de Luxemburgo por casi dieciocho aos,afronta la situacin ms apremiante de su carrera al ser acusado de haber generado un controvertido marco fiscal, cuando estuvo al frente del Gran Ducado, que ha permitido que 340 multinacionales entre ellas, Pepsi, Ikea o Deutsche Bank se afinquen en Luxemburgo para evadir impuestos.

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El personaje que habra facilitado estos acuerdos, muchos de ellos ad hoc y bendecidos por las autoridades fiscales luxemburguesas, es Marius Kohl quien como jefe de una agencia federal llamada Socits 6, aprob los acuerdos tributarios con las corporaciones multinacionales personalmente, ayudndoles a ahorrar miles de millones de dlares.

Los pactos fiscales se firmaron entre el 2008 y 2010, coincidiendo con el periodo en que Juncker compatibiliz su labor de primer ministro con la de ministro de Finanzas, cartera que ocup desde 1989, con competencias directas sobre el fisco. Aunque su portavoz en la Comisin intent desvincular esas decisiones de la accin directa de Juncker, las probabilidades de que el titular de Finanzas conociera ese marco en un pas de 550.000 habitantes son elevadas.

En Luxemburgo, las empresas extranjeras tienen acceso a deducciones y estructuras de holding que pueden reducir sus cuentas de impuestos desde la tpica tasa corporativa de 29% hasta casi cero. Usualmente, pagan pocos o ningn impuesto por regalas, dividendos, intereses y ganancias de liquidaciones o de capital.

A pesar de que Europa tiene reglas estandarizadas en todo tipo de rubros la poltica tributaria sigue siendo dominio de cada pas.

El escndalo refuerza la idea de que la Unin Europea debe asumir una postura ms estricta con los gobiernos que se desvan de la norma tributaria creando pequeos parasos fiscales, como sera el caso de Luxemburgo.

Por su parte, la Comisin, ahora liderada por Juncker, anunci que ampliar las investigaciones ya abiertas contra Luxemburgo y otros pases por prcticas similares si encuentra motivos para hacerlo, sin prejuzgar la decisin definitiva. Es decir, si Juncke es culpable lo har conocer.