Alianza del Pacífico buscará incorporar países asociados
Alianza del Pacífico buscará incorporar países asociados
Marcela Saavedra P.

El panorama económico y comercial se complica para , el socio más grande del Perú, Colombia y Chile, en el bloque de la .

A diferencia de sus pares, sus proyecciones de avance de PBI se han visto recortadas en 0,6 puntos porcentuales para este año, tal como reportó el Fondo Monetario Internacional (FMI) esta semana.

El rumbo de sus relaciones con Estados Unidos es el factor que asesta un revés a su crecimiento. Por un lado, el presidente Donald Trump anunció su intención de renegociar el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), acuerdo suscrito con México y Canadá, con evidentes intenciones de favorecer a la industria estadounidense. “[México] se ha aprovechado de EE.UU. por demasiado tiempo”, remarcó el magnate tras divulgarse que el mandatario mexicano, Enrique Peña Nieto, canceló un viaje a Washington para reunirse con él. 

Por otro lado, el impacto en inversiones también se ha hecho sentir. Ante un posible incremento arancelario de 20% al ingreso de productos mexicanos a territorio norteamericano, tanto firmas de la industria automotriz como otras de intensiva mano de obra han repensado sus proyectos en ese país. “Los aranceles nunca son buenos. Tenemos dos plantas, una en Nueva Zelanda y otra en México, y tenemos la capacidad de abastecer a EE.UU. desde Nueva Zelanda si eso tiene más sentido económico”, dijo ayer Lewis Gradon, presidente ejecutivo de F&P Healthcare, a la agencia Reuters.

LA OPORTUNIDAD
“Sin duda, un escenario pesimista sobre México tiene impacto regional y con ello, en la Alianza del Pacífico”, explicó Melvin Escudero, profesor de posgrado de la Universidad del Pacífico (UP).

No obstante, agregó, su efecto será mucho menor al que causó la crisis de Brasil hace algunos años. El mayor remezón, dijo, tendrá alcance en el mercado financiero más que en la economía real de América Latina, por un tema de distancia. “En gran parte el efecto inicial ya ha sido descontado en México. Pero de concretarse el incremento arancelario, los activos como ETF [fondos negociables] o el EMBI [índice de riesgo-país] podrían sufrir”, detalló Escudero.

Sin embargo, la tensión con EE.UU. puede ser también una oportunidad para que México fortalezca sus lazos con el bloque regional. “México tiene la oportunidad de limitar su dependencia a EE.UU. y uno de los mercados naturales a los que podría volver la mirada como aliado es a la Alianza del Pacífico”, sostuvo Claudia Sícoli, directora de la carrera de Economía y Negocios Internacionales de la UPC.  

En ese sentido, se podrían construir mayores corrientes comerciales en el bloque y despertar a la que es la octava economía del mundo, afirmó Carlos Posada, director ejecutivo del Instituto de Investigación y Desarrollo de Comercio Exterior (Idexcam).  
Con una visión marcada en el Asia-Pacífico, el momento es aun más propicio para la Alianza del Pacífico. “Pero aún queda completar la profundización del bloque”, reconoció Eduardo García-Godos, director del Instituto Peruano de Facilitación del Comercio. 

La puesta en marcha de una ventanilla única de comercio (VUCE) con servicios y trámites completos, así como la creación de un observatorio logístico común son dos de las metas pendientes por desplegar. También –y más importante– la completa armonización de sus regulaciones, pendiente de negociación y aplicación. 
Sin ello, el interés mundial por el bloque, que llevó a Francia y a la Unión Europea por acercarse al grupo latinoamericano esta semana, correrá el riesgo de quedarse en solo buenas intenciones.

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