Consejos para instalar y lucir repisas en la habitación

Para garantizar la resistencia de una repisa, debe fabricarse con materiales como madera de pino o MDF, de al menos 5 cm de espesor. Cada pieza debe tener como mínimo 30 cm de profundidad, para que los objetos a guardarse se acomoden adecuadamente.

Para que las repisas cobren mayor relevancia, pueden colocarse a 70 cm por encima de la cabecera de la cama; de lo contrario, puedes emplear los extremos o las esquinas vacías de tu habitación para instalarlas, deben ir a una altura mínima de 1,20 m del piso, para que sean cómodos de emplear.

“Si quieres una pieza sencilla, dispón repisas de corte lineal, de lo contrario, puedes apostar por elementos con formas curvilíneas o triangulares o siluetas con volúmenes escultóricos”, dice la interiorista Erika Torres. Su instalación se realiza a través de perforaciones de al menos 7 cm de profundidad en el muro y con ayuda de tarugos, donde se fijan los clavos que sostendrán la pieza.

Toque de distinción

Tiñe estos módulos con pintura de poliuretano con acabado mate, ya que es de larga duración. Usa tonos neutros para adquirir una apariencia sencilla o tonos más llamativos, como el amarillo, naranja o fucsia, si deseas obtener un acento de color. De querer destacar la zona donde se ubican, enmarca sus bordes con tiras de luz LED, que además producen un efecto flotante.

Encuentra algunas ideas de repisas en la galería que acompaña esta nota.