Sean McKeown, el director artístico encargado de Sép7imo Día. (Foto: Difusión)
Sean McKeown, el director artístico encargado de Sép7imo Día. (Foto: Difusión)

“Quiero exceder la imaginación de los espectadores, e inspirar sus corazones y mentes una y otra vez”, dice Sean McKeown cuando le pregunto qué quisiera lograr con el famoso circo tras el show basado en la música de Soda Stereo que lo traerá a Lima desde el 17 de junio. Explica también que su entusiasmo es compartido por todos los integrantes del elenco y la producción, quienes, aun teniendo orígenes diversos, son capaces de conectar con la sensibilidad de la audiencia hablando un mismo idioma sobre el escenario. “Espero seguir creando. Mi rol creativo en el show es continuar aumentando el nivel a través del tiempo y seguir trayendo cosas nuevas”. En esta conversación, el australiano que integra el grupo desde el 2001 cuenta cómo fue sumergirse en el universo Soda.

¿Cómo fue tu primer contacto con la música de Soda Stereo?
Fue sorprendente. Estuve un tiempo en Argentina en el 2009. En ese entonces escuché su música un poco, pero cuando comencé a trabajar en el proyecto, lo hice mucho más. Me sentaba solo cada vez que los escuchaba, entendiendo los mensajes entre las líneas de las canciones. Ciertamente esta música es un símbolo para toda una generación y se refleja en la pasión que tenemos por Soda Stereo.

¿Y cuál fue tu reacción cuando se propuso la idea de hacer un show sobre la banda?
Fue la idea de un grupo de productores en Montreal. Fue bastante salvaje entender a Soda Stereo. Tuvimos que escuchar mucho su música y captar la importancia que tiene para el público. Debía interpretar por qué le resulta impactante a la gente en Latinoamérica y pensar el formato que se debía tomar, seleccionar la música y crear algo único. En realidad, me emocionó bastante.

¿Cuál fue el mayor reto al convertir esa música en un espectáculo como este?
Creo que una de las cosas más importantes ha sido y es respetar la música y el contenido original. Y, al mismo tiempo, tratar de mantenerlo único, como siempre hacemos en el Cirque du Soleil. Pero las reacciones que tenemos… ¡Dios, es tan increíble que el público responda así! Creo que logramos hacer que ambas cosas se mantengan muy bien.

Cuando concibieron la idea de realizar este espectáculo, ¿cuáles pensaron que serían las principales dificultades?
Una de las grandes preguntas era sobre la logística. ¿Dónde estaría bien comenzar la función? Y los productores decidieron que el programa comenzaría en Buenos Aires para ver los orígenes de la banda y para llevar a cabo todo el espectáculo. Y fue difícil hacerlo, tratar de que se entienda la pasión que se tiene por ellos a nivel internacional. Que se capte la pasión por la música, por la ciudad y los orígenes de estas canciones. La banda —Charly Alberti y Zeta Bosio—, la familia de Cerati y Marcelo, el director, seleccionaron los temas.

¿Qué es lo que más se le exige a un integrante del Cirque du Soleil?
Bueno, debe ser bastante riguroso con lo que hace. Principalmente, hay que entender que trabajando así se llega al punto de excelencia en el que está el elenco. Además, la actitud es importante: la generosidad que uno tiene, la actitud en escena y el cuidarse entre todos. También buscamos aumentar el nivel que ponemos en escena; entonces, se deben ver todas las cosas relevantes, agregar elementos para que el público vea que trabajamos duro y darle a la audiencia un show espectacular.

Pero, si te pidiera una síntesis: ¿cuál es la mística que los define?
La pasión que sentimos a través de la música. Nos da mucha energía.

Volviendo a Sép7imo día, como director artístico, ¿cuál fue la parte más emocionante?
La creación de por sí da bastante trabajo. Creo que mucha gente da energía y actitud para crear el show. Para mí, la mejor parte es colaborar con el grupo para crear algo nuevo y único para Cirque du Soleil. Y, en este espectáculo acerca de Soda Stereo, lo más emocionante fue respetar su música y presentarla en una forma que le guste al público.

Los miembros del circo tienen distintos orígenes y culturas. ¿Cómo los siente trabajando con la música de la banda?
Son bastante apasionados y transmiten mucho sus emociones. Trabajar con el público los ayuda. A nivel individual, no podría describir la conexión que siente cada uno con la música porque ellos buscan en lo profundo de sus emociones. Buscamos traducir las letras y tratamos de reflejarlas en nuestras vidas, en nuestros sueños, en nuestros corazones.

Han realizado más de 40 espectáculos, que incluyen los shows con la música de Michael Jackson y The Beatles. ¿Qué lugar tiene Sép7imo día en la historia del Cirque du Soleil?
Todas fueron experiencias muy hermosas. No puedo asignarles un lugar porque tenemos que reconstruir cada canción y cada artista. Con Soda Stereo reinventamos lo que hacemos y nuestras experiencias para que la gente lo vea y disfrute de la mejor manera.

¿Cómo crees que se hubiera sentido Gustavo Cerati si pudiera ver el espectáculo?
Sé que fue un gran músico e increíble compositor que recibió mucho amor de su público en cada presentación. Este espectáculo es, en parte, en honor a su memoria. Ojalá a él le hubiese gustado.

¿Cuál es su canción favorita de Soda?
“En la ciudad de la furia”, definitivamente. Habla de la ciudad y yo amo Buenos Aires. También escuchando la canción tuvimos la oportunidad de ver sus videoclips y presentaciones en televisión para ponerlos en escena. Espero que este entusiasmo que sentimos en Buenos Aires llegue a Lima de la misma manera.

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