México: El tráiler que fue abandonado en Jalisco tenía 273 cadáveres

Ciudad de México. Un camión itinerante que contenía los cuerpos de una rebasada morgue en México, en realidad contenía 273 cadáveres, no los 157 que se dijo en un principio.

Autoridades describieron la tarde del miércoles cómo el camión tuvo que moverse en las afueras de la ciudad occidental de Guadalajara porque vecinos y funcionarios rechazaban su macabro cargamento, y el mal olor.

Un total de 444 cuerpos estaban apilados en la morgue estatal, mientras los homicidios en México han aumentado 17% en lo que va del año. De los cuerpos, 49 permanecen en el forense, 273 fueron apilados en el camión y 122 se mantuvieron en un segundo tráiler refrigerado en el estacionamiento de la morgue.

Dante Haro Reyes, fiscal de derechos humanos del estado de Jalisco, dijo que la intención no era que el camión se moviera ya que el plan original era llevar los cuerpos sin reclamar a una bodega refrigerada.

Pero ese viaje relativamente corto se complicó.

Haro Reyes dijo que las autoridades locales de la zona conurbada de Tlaquepaque clausuraron la bodega por falta de permisos cuando se enteraron del plan a mediados de septiembre. Las autoridades locales afirman que nadie los consultó para almacenar los cadáveres ahí.

Entonces, el camión intentó ir a la bodega de evidencias de la fiscalía estatal, pero era demasiado grande para entrar. Mientras los funcionarios averiguaban cómo agrandar la entrada, la empresa de rentas del camión sugirió una ubicación temporal para estacionar el tráiler.

Camino a la tercera ubicación, el camión se atascó en el lodo en un campo atrás de un desarrollo habitacional. Una grúa de camiones fue llevada para sacarlo, pero para entonces los residentes ya se quejaban del olor y publicaban videos del camión manchado de sangre en redes sociales.

A principios de esta semana, el gobernador del estado despidió al director del servicio forense estatal y, el miércoles, despidió al fiscal general del estado, ambos responsables de supervisar la identificación y entierro de cadáveres sin reclamar.

Después de una serie de escándalos hace unos años por los entierros de víctimas en tumbas deplorables y con poca identificación -por lo general con botellas de gaseosas con notas escritas junto a los cuerpos- México implementó requisitos más severos para identificar y sepultar cuerpos de tal forma que podrían permitir una futura exhumación. Se toman pruebas de ADN y huellas dactilares antes de enterrar los cuerpos sin identificar.

El gobierno estatal intenta construir suficientes cementerios para colocar dichos cuerpos, pero el avance ha sido lento.

Haro Reyes dijo que, de los 444 cuerpos, sólo 60 habían sido preparados para el entierro según las nuevas normas. Los otros esperan ser examinados, atados en bolsas negras de plástico en los camiones, que ya regresaron al estacionamiento de la morgue.

Fuente. AP