fuera de juego

El final de la mafia que durante 41 años gobernó la FIFA y se apropió del deporte más popular del mundo. Una red de corrupción y sobornos que llegó hasta el Perú, y que apenas empezamos a descubrir.

"No todas las mafias matan y esta era muy incompetente"

La temporada de arrestos en la FIFA ha reivindicado el trabajo de Andrew Jennings, reportero especializado en crimen organizado que denunció los excesos en el fútbol hace más de una década. Ahora revela más detalles a El Comercio.

Sábado 26 de diciembre del 2015

Durante los últimos 15 años, Andrew Jennings se ha dedicado a destapar los casos de corrupción que ahora envuelven a la FIFA. “Herr Blatter, ¿alguna vez ha cobrado una coima?”, fue la pregunta que puso en marcha la investigación en el 2002, y la que le cerró las puertas de la sede de Zúrich. Convenientemente ignorado y criticado por sus pares internacionales, el reportero persiguió a Blatter y compañía en busca de una réplica, pero solo consiguió evasivas. Hasta que entró en contacto con el FBI, y las piezas empezaron a caer.

Misión cumplida. A los 72 años, Andrew Jennings ha declarado que se retirará después de esta investigación.

Antes de investigar a la FIFA estuvo detrás del Comité Olímpico Internacional (COI). ¿Cuándo y cómo obtiene la primera pista sobre los problemas tan profundos en la FIFA?

Las investigaciones se superpusieron, porque noté que la misma gente estaba trabajando en el COI y en la FIFA. Cuando Juan Antonio Samaranch –un nazi hecho y derecho que dirigía el COI– se retiró, cambié mi enfoque al fútbol y no podía creerlo. Llegué a una de las conferencias de prensa, hice una pregunta y Blatter no quiso revelar nada. La mayoría de sus actividades son subterráneas, y eso no podía durar.

Durante estos años ha tenido que encarar a enfurecidos presidentes de federación, pero Ud. siempre lucía calmado. ¿Es parte de su estrategia?

Sí, es que sabemos que son unos maleantes. Tienen un estilo de vida muy bueno, mucho dinero y a veces dicen que te van a demandar con sus abogados, pero nunca lo hacen. Siempre supe que iban a caer. No sabía cuándo, pero lo veía venir, y el resto ya es historia.

Hubo años en que parecía que nada cambiaría. ¿Alguna vez le aconsejaron dejar esta investigación por ese temor?

Verán, yo era muy cuidadoso con lo que obtenía. Me aseguré de que la gente dentro de la FIFA supiera que era un investigador serio, y empezaron a proporcionarme documentos que golpeaban la imagen que la FIFA difundía en público.

Para ser una mafia, no parecen unos tipos muy peligrosos. ¿Alguna vez recibió amenazas contra su integridad?

Recibí amenazas legales, pero no me molestaban porque yo sabía que nunca aparecerían en una corte, o los acusarían de falso testimonio. A través de sus abogados, me escribían unas cartas muy tontas, como que tenía 14 días para dejar el asunto o me ganaría un gran problema. Sabía que no lo pondrían en práctica. No todas las mafias matan y esta era muy incompetente. Eventualmente, como les dijeron sus madres, si te metes con malas personas, te atraparán. Y a ellos los han atrapado.

¿Cuándo fue su primer contacto con el FBI?

Hablé con ellos cuando me buscaron en el 2009, y les di información sobre Chuck Blazer, que empezó a usar un micrófono oculto [para espiar a sus pares]. Tomó tiempo, pero me da gusto que lo hiciera, porque ahora lo ves y hay cientos de páginas de investigación. El fiscal suizo Michael Lauber dijo que podrían tomarse entre cinco y seis años. Pero ellos [en la FIFA] no entienden que los agentes federales están detrás de ellos para ponerlos en la cárcel.

Hasta ahora, buena parte de los arrestos han sido de este continente, ¿pero qué pasa con los europeos?

Bueno, ahora se está investigando el escándalo ISL. Blatter alega que ya se terminó ese proceso y que ya ha sido juzgado. Pues ahora el FBI está haciendo un trabajo serio. Havelange admite en una carta que Blatter sabía todo, y cada uno tendrá que explicarlo al FBI algún día.

¿Cuánta gente que sigue trabajando en la FIFA también está involucrada?

Eso es algo muy secreto. Por supuesto que la gente que queda en la FIFA quiere estar en el lado ganador, pero la FIFA no tiene esperanza. Debemos verla como una organización criminal que ha sido expuesta, y se ha quedado sin credibilidad.

La captura. Jennings persiguió por años a Blatter, Platini, Leoz y el resto de la plana mayor en busca de explicaciones sobre la repartija.

¿Cuál fue su reacción ante lo sucedido el lunes, especialmente la respuesta de Blatter?

¡Fue tan irrelevante! La verdadera crisis vendrá cuando la policía de los dos países se involucre, que es lo que harán después de Navidad. Este solo es un espectáculo secundario. Blatter es historia.

"La FIFA es una organización criminal que ha sido expuesta totalmente”.

¿Cuál es la siguiente acusación que podríamos esperar para las próximas semanas?

No conozco todos los asuntos que investigan, pero sé que los suizos todavía están explorando los nueve terabytes de información que obtuvieron. Es ahí donde la verdadera actividad va a suceder, no en el comité disciplinario de la FIFA. En esta corte se va a prisión.

¿Irán todos a la cárcel? Los dirigentes brasileños –Havelange, Teixeira, Del Nero–, por ejemplo, siguen libres en semirretiro y ni se esconden...

Tenemos que esperar lo que la justicia brasileña decida porque [esa libertad] no puede durar para siempre. Ya hay presión sobre el país, que está pasando por problemas severos y va a necesitar ayuda. Los agentes estadounidenses van a decirles “vamos, dennos a Ricardo Teixeira”, y van a hacer que suceda. ¿O van a decir “nos vamos a la bancarrota pero no les entregamos a Teixeira”? ¡No cuentes con eso, Ricardo!

Eugenio Figueredo (derecha) admitió que todos los dirigentes de Conmebol –Leoz y Teixeira incluidos- recibían dinero de las empresas de televisión por la firma de contratos.

Terminada la era FIFA, ¿quién debería liderar la administración del fútbol mundial? ¿Cómo debería reconstruirse?

Primero habría que abandonar este concepto de liderazgo. No tiene que haber un líder. Vamos a los hinchas. Si los auspiciadores son serios, pueden poner dinero; los hinchas pueden tener reuniones y decidir cómo quieren que su fútbol sea manejado. No necesitamos esta superestructura de Blatter y sus aliados. Hay que preguntar a los hinchas qué tipo de organización mundial quieren para dirigir el deporte en sus formas más pequeñas. Organizar la Copa del Mundo cada cuatro años no necesita este tipo de trabajo inflado que tienen ahora en la FIFA.

¿Qué le preguntaría a Blatter si lo tuviera en frente?

¿Por qué no te callas y te alistas para ir a prisión?

Celebración. Documental triunfante de Jennings emitido el lunes 7 de diciembre por la BBC.

créditos

investigación y textos:
liliana michelena
juan aurelio arévalo
renzo giner vásquez
diseño y desarrollo web:
armando scargglioni carpio
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