Un grupo de unos 20 adolescentes de dos pabellones de Maranguita se amotinó y causó un incendio anoche. (El Comercio / Carlos Hidalgo)
Un grupo de unos 20 adolescentes de dos pabellones de Maranguita se amotinó y causó un incendio anoche. (El Comercio / Carlos Hidalgo)
Redacción EC

Ante el motín e incendio que el último martes se registró en el Centro Juvenil de Diagnóstico y Rehabilitación de Lima, conocido como ‘’, en el distrito de San Miguel, la Sexta Fiscalía de Familia de Lima abrió investigación para determinar a los responsables de los destrozos.

Durante la revuelta iniciada por un grupo de veinte adolescentes, cinco docentes fueron retenidos varias horas y se destruyeron colchones y camas.

La investigación fue dispuesta por la fiscal Florencia Ambrocio Barrios, quien ordenó una serie de diligencias que deberán ser ejecutadas en los próximos días por personal de la Dirección de Seguridad del Estado.

Según informó la fiscalía, la medida se dispone luego que el fiscal provincial penal de turno de Lima, Wilfredo Avellaneda Esaine, “consiguiera que los cerca de 700 menores depongan su actitud tras protagonizar diversas acciones violentas”.

De acuerdo a los menores, su protesta era por supuestos abusos por parte de un grupo de educadores. Ante ello, intervino el fiscal Avellaneda junto al subgerente de Servicios Juveniles del Poder Judicial, Gustavo Campos Peralta; y del jefe del Programa de Asuntos Penales y Penitenciarios de la Defensoría del Pueblo, Carlos Fernández Millán, para escuchar sus demandas. También participaron representantes de la Defensoría del Pueblo.

En la evaluación de daños se logró verificar que los destrozos fueron ocasionados en los pabellones Nazareno y Gandhi, donde se encontró dos forados por donde presuntamente pretendían fugar unos 20 jóvenes.

Además, tras apagar el fuego, se encontró graves daños a la infraestructura y bienes del establecimiento ocasionados durante el motín.

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