Def Leppard: una banda de rock perseguida por la mala suerte

RAFAEL VALDIZN (@rvalmat)

La mala fortuna les ha jugado sucio a unas cuantas bandas de rock. Por ejemplo, los estadounidenses Lynyrd Skynyrd perdierona la mayora de sus integrantes cuando, en 1977, el avin en el que viajaban cay en los bosques de Gillsburg. O si no, est la negra historia de Badfinger, los creadores de varios hits de influencia Beatle, entre ellos Carry On (Til Tomorrow), versionado por nuestros compatriotas de We All Together: suvocalista y guitarrista Pete Ham se colg en 1975; el bajista Tom Evans hizo lo mismo ocho aos despus. Finalmente, el baterista Mike Gibbins falleci en el 2005, mientras dorma, por culpa de un aneurisma cerebral.

Cmo no hablar de losRamones, si sus cuatro integrantes originales se nos fueron entre el 2001 y este ao. Joey, Dee Dee, Johnny y Tommy fueron visitados por el ngel de la muerte y convirtieron a la mtica banda neoyorquina en una de las que han tenido el ms trgico destino.

Pero otro grupo que no se queda atrs es Def Leppard, el quinteto de Sheffield (Inglaterra) que surgi a fines de los aos setenta como una de las fuerzas lderes del llamado new wave of british heavy metal (aunque ms adelante coquetearon demasiado con el pop). Def Leppard ha tenido un recorrido erizado de baches. Llmelo infortunio o tal vez consecuencia de serios errores de algunos de sus integrantes.

El caso ms reciente va ms con la mala fortuna. A mediados del ao pasado, Vivian Campbell, uno de los guitarristas de Def Leppard, anunci que padeca linfoma de Hodgkin, un tipo de cncer originado en los ganglios linfticos. A fines de ese ao, el ex integrante de Dio y Whitesnake alivi los pesares de sus seguidores al anunciar que la enfermedad haba sido vencida. Lamentablemente, no fue as. El propio Campbellsali, en junio de este ao,a decir que se haba apresuradoen dar por muerto al cncer, pues este haba regresado. La ltima actualizacin del caso es de hace un par de semanas: el msico, de 51 aos, nacido en Irlanda del Norte revel que el mal haba sido aplacado nuevamente. Esta vez, sin embargo, mostr ms cautela: El escner muestra que el cncer est controlado. Es una buena noticia, pero estoy tratandode no emocionarme mucho, pues escuch esa misma frase el ao pasado, solo para decepcionarme pocos meses despus. En todo caso, sera mejor decirlo as, la batalla contina.

EL PASADO LOS CONDENA

Pero la mala suerte (o las consecuencias de algunos errores)ya haba aparecido muchos aos antes. Muy temprano en su trayectoria. El 31 de diciembre de 1984, Rick Allen, baterista del quinteto, por entonces de solo 21 aos, conduca su Chevrolet Corvette, rumbo a una fiesta en la casa de su familia en Sheffield, cuando un auto Alfa Romeo lo pas. Aquello se convirti en una carrera. En su afn de sobrepasar al otro carro, Allen perdi el control. La volcadura fue aparatosa; el msico sali disparado del auto mientras su novia de la poca termin dentro del Chevrolet con lesiones poco severas. Allen no corri con la misma suerte: su brazo izquierdo sufri una fuerte lesin y tuvo que serle amputado.

Rick Allen pens que era el final. Imaginan a un baterista de un solo brazo? Felizmente, dentro de lo negro del panorama, hubo una salida: le fabricaron una batera a su medida, para que pudiera reemplazar con los pies algunas funciones que cumpla su brazo izquierdo. Tom su tiempo de adaptacin hasta que finalmente pudo sentarse nuevamente tras la batera de la banda. Fue un triunfo.

En 1991, no hubo una segunda oportunidad. Esta vez, el destino estaba escrito para Steve Steaming Clark, uno de los guitarristas originales de la banda. Luego de pelear por aos contra el alcoholismo, Clark sucumbi ante una sobredosis de alcohol y medicamentos. El cuerpo del msico fue encontrado en su departamento en Chelsea, a la maana siguiente.Justamente, el lugar de Steaming Clark fue ocupado por Vivian Campbell.

Este ao, Def Leppard sali de gira con Kiss. Joe Elliott (voz), Phil Collen (guitarra), Vivian Campbell (guitarra), Rick Savage (bajo) y Rick Allen (batera), pese a las adversidades, continan en la brega. Aunque sus discos ya no vendan la cantidad astronmica de copias, como ocurri con trabajos como Pyromania (1983) e Hysteria (1987), la lucha no debe parar.