La alineación completa: Gabriel Bellido (bajo), Gonzalo Farfán (guitarra y voz), Saito Chinén (batería) y Riki Noriega (guitarra y voces). (Foto: Francisco Medina)
La alineación completa: Gabriel Bellido (bajo), Gonzalo Farfán (guitarra y voz), Saito Chinén (batería) y Riki Noriega (guitarra y voces). (Foto: Francisco Medina)

El mejor momento para el 'chikipunk' limeño fue la primera parte de la década del 2000. Bandas como 6 Voltios y Diazepunk destacaron con una propuesta que mundialmente era conocida como punk o hardcore melódico. El sonido descuidado y las letras sobre problemáticas adolescentes definían el género.

En ese contexto, lanzó "Rompecaminos" (2003), álbum que marcó un hito en esa movida. Ahora se cumplen 15 años de su publicación y la banda nacional lo celebrará el sábado 19 con un concierto en el C.C. Festiva (Av. Alfonso Ugarte 1439, Cercado de Lima).

Una de las razones por las que destacó fue la calidad de su sonido. Gonzalo Farfán, vocalista de la banda, recuerda que para ese disco decidieron alejarse de lo artesanal –que se oye en su debut "Bombardero" (2001)– e invertir en un buen estudio de grabación. "Queríamos trascender los estándares del punk rock nacional y por eso nos fuimos al otro extremo y grabamos en el estudio Elías Ponce", dice Farfán.

Mientras que otras bandas del género invertían US$500 por disco, ellos utilizaron US$5 mil. Equipos de buena calidad y la experiencia de José Carlos Ponce –ingeniero de sonido que tuvo en sus manos a casi todas las bandas de Lima–, dieron a luz a 12 canciones.

En las letras también se notó la diferencia. Mientras que el resto de bandas cantaba sobre comer sánguches o las primeras borracheras, Inyectores huía del mensaje directo y jugaba con metáforas. "La mente es un lugar" o "Camino al sol" son ejemplos.

Farfán reconoce que la edad de los integrantes de Inyectores –entonces, él tenía 36, mientras que en la movida promediaban los veinteañeros– sí pudo haber tenido que ver con lo antes mencionado. "Tal vez nosotros, a diferencia de los chicos de 20 años que estaban en la universidad, teníamos más recursos para trabajar los discos", dice.

Con más de 3 mil copias, "Rompecaminos" es el disco más vendido de la banda. Aun así, Farfán finaliza con una autocrítica: "Es un disco muy pulcro, perfectito. De repente me hubiera gustado que en ciertas partes fuese más sucio".

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