MDN
La estrella de la selección de Portugal marcó 4 goles en el Mundial. (Foto: Reuters).
Agencia AFP

Messi sucumbió ante una Francia magistral,  se estrelló contra la muralla defensiva de Uruguay y en horas los dos reyes del fútbol dijeron adiós al este sábado. El destino, empecinado en cruzar sus carreras, volvió a hablar y les privó a los dos un título mundial.

Al dios fútbol poco le importó los diez balones de oro que suman entre ambos, y tanto Argentina como Portugal mastican dos amargas derrotas ... quizás en su último Mundial en plena forma.

Un partido faltó para que se vieran las caras en Nizhni Nóvogorod, las duplas Griezmann-Mbappé y Suárez-Cavani se ganaron el pasaje a cuartos de final con triunfo de Francia ante Argentina (4-3) y Uruguay ante Portugal (2-1), pero los flashes se quedaron con la desazón del argentino y el portugués.

Horas después del adiós de Messi, llegó la hora de la despedida para su 'archirrival': Portugal no pudo con Uruguay y Cristiano dijo adiós. Pepe agrietó la retaguardia celeste y le propinó su primer gol en Rusia, pero Diego Godín y compañía no permitirían más. Adelante, Edinson Cavani se robó la corona, anotó dos tantos y aniquiló las esperanzas de un impotente Cristiano Ronaldo.

El ambicioso delantero portugués que admite sin complejos: "mientras juegue, quiero ganar todo lo que se pueda".

El Mundial parece escaparse de su lista, que suma ya varias Champions League y éxitos en las ligas de España e Inglaterra. Pero esa ambición no le tapa su lado más humano y esta noche, quizás la más oscura de su carrera, también lo demostró: Cavani se lesionó y Cristiano lo ayudó a salir del campo.

En el partido, el atacante tuvo pocas chances de mostrar su poder: un tiro libre en la barrera, otro de media distancia frenado por Fernando Muslera, y muchas carreras sin recompensa.

A diferencia de Messi, Cristiano Ronaldo tiene un premio consuelo: la Copa de Europa que levantó con su Portugal en 2016.

Contenido sugerido

Contenido GEC