El Gobierno chino tomará medidas activas para continuar controlando la contaminación del aire, afirmó hoy el vocero del Ministerio chino de Asuntos Exteriores, Hong Lei, cuando Beijing vive el tercer día de la peor polución de su historia.

En su rueda de prensa diaria, el portavoz recordó que las autoridades ya han tomado medidas de emergencia contra la espesa capa de contaminación que afecta a la mitad del país.

El Gobierno chino da mucha importancia a la protección medioambiental y tomará medidas activas para continuar controlando la contaminación del aire, subrayó Hong.

Desde el sábado pasado, las autoridades meteorológicas chinas instan a los ciudadanos a permanecer en sus viviendas y a usar mascarillas respiratorias en caso de salir a la calle. También se ha lanzado un llamamiento a los residentes para que utilicen el transporte público y dejen sus coches en casa para combatir la espesa nube de smog.

En Beijing, donde el sábado por la noche se alcanzaron niveles de contaminación de 993 microgramos, muy por encima de los 25 que la Organización Mundial de la Salud (OMS) considera aceptables, se han tomado medidas de emergencia como la reducción de las emisiones fabriles y de la circulación de vehículos oficiales.

HOSPITALES Los hospitales informaron de un fuerte aumento de los pacientes con problemas respiratorios, informó la agencia de noticias estatal Xinhua. También se presentaron personas con problemas del corazón y circulatorios. Los más afectados fueron los ancianos y los niños.

El naranja es la segunda alarma más alta. De acuerdo con el plan de emergencia, el 30 por ciento de los automóviles del gobierno, el partido y la administración de la ciudad no podrán viajar por la ciudad. Las emisiones de 54 fábricas serán reducidas en un 30 por ciento. En 38 obras fueron suspendidas las tareas por el polvo que levantaban.

Según Greenpeace, solo en 2012 los altos niveles de contaminación del aire causaron unas 8.500 muertes prematuras en Beijing, Shanghái, Cantón y Xian.