El ministro delegado de Exteriores camerunés, Joseph Dion-Ngute, dijo hoy estar un poco sorprendido de que los siete franceses secuestrados en el norte de Camerún, todos ellos de una misma familia, viajaran sin un guía local.

Generalmente es una zona bien protegida, pero siempre pedimos a los touroperadores que hagan que los turistas vayan acompañados por un guía. Es lo normal, y por eso estamos un poco sorprendidos de que estuvieran solos, señaló en una entrevista telefónica concedida a la cadena BFM TV.

El grupo, de tres adultos y cuatro niños de edades comprendidas entre los cinco y los 12 años, fue interceptado a bordo de un vehículo por hombres armados un día después de haber visitado la reserva natural de Waza, en el norte del país, cerca de la frontera con Nigeria.

Es la primera vez que constatamos algo parecido. Evidentemente el dispositivo de seguridad ha aumentado, indicó en la cadena gala, al tiempo que recalcó que, a su juicio, no hay riesgos en esa zona, ni antes del incidente ni sobre todo después, una vez que se han incrementado los controles.

El ministro señaló que las fuerzas de seguridad camerunesas mantienen contactos de muy alto nivel tanto con las autoridades galas como las nigerianas, pero se negó a confirmar si, tal y como afirman los medios franceses, los rehenes han sido conducidos a Nigeria.

Solo puedo decir que estamos en contacto para buscar a los secuestrados, indicó en esa entrevista telefónica y añadió que espera lograr un desenlace favorable en este suceso, que supone el primer secuestro de occidentales en la zona.

TERRORISTAS DE MALI Nadie se ha atribuido todavía la autoría del secuestro, pero según el ministro, y en línea con las sospechas del Ejecutivo francés, evidentemente no se descarta que haya sido obra del grupo Boko Haram, de procedencia nigeriana y cuyos miembros, según Francia, fueron formados en Mali.

Aunque pongamos un gendarme por todas partes, no es imposible que esa gente pueda penetrar en el interior de Camerún para cometer los actos mencionados, concluyó el representante camerunés, quien insistió en que el dispositivo de seguridad del país ya era importante antes del secuestro.

Con estos últimos siete secuestrados, que según los medios galos han sido divididos en dos grupos, separando a los niños de los adultos, se eleva a 15 el número de franceses retenidos en el extranjero, todos ellos en África.