Media docena de vehículos militares fueron desplegados hoy junto al centro comercial de Nairobi asaltado ayer por la milicia fundamentalista islámica somalí Al Shabab, cuyo ataque dejó al menos 39 muertos y 150 heridos, según cifras del presidente de Kenia, Uruhu Kenyatta.

Según pudo comprobar Efe, tres tanquetas acorazadas y tres camiones militares entraron en la calle Mwanzi, donde está ubicado el lujoso y concurrido centro comercial Westgate.

Además, el Centro de Operaciones de Emergencia de Kenia (NDOCK, en su acrónimo inglés) informó hoy, a través de su cuenta de Twitter, de que un número indeterminado de rehenes continúa en el interior del edificio, sitiado por las Fuerzas de Seguridad de Kenia desde el inicio del ataque.

El número de rehenes sigue siendo desconocido, () están en distintas zonas, aseguró el NDOCK, que agregó que se ha contenido a los pistoleros en un lugar, pero hay rehenes en otras zonas cercanas que no pueden acceder a la salida.

Asimismo, la fuente precisó que a las 06:00 hora local (10 p.m. en el Perú), el Ejército y las Fuerzas Especiales controlan la primera y la segunda planta de Westgate. Partes de la planta baja y el sótano siguen sin estar seguras.

El ataque comenzó alrededor de las 13:00 hora local (5 a.m. en el Perú) de ayer sábado, cuando una decena de miembros de Al Shabab irrumpieron en el centro comercial, lanzaron una granada en el interior y empezaron a disparar contra los numerosos compradores que se encontraban en el edificio.

El Ejército local tiene rodeado Westgate, y ha alejado a la prensa de las inmediaciones del edificio.

DECENAS DE ATAQUES Desde octubre de 2011, cuando el Ejército de Kenia entró en Somalia como respuesta a una oleada de secuestros supuestamente obra de Al Shabab en el vecino territorio keniano, los radicales islámicos amenazaron a Kenia con represalias por esa iniciativa.

Desde entonces, se han registrado decenas de ataques en zonas fronterizas con Somalia, en la ciudad portuaria de Mombasa y en el propio Nairobi, que han dejado más de un centenar de víctimas hasta el momento.