Funcionarios de Colorado dicen que el distrito escolar en un suburbio de Colorado Springs discriminó a Coy Mathis, un niño transgénero de 6 años, al impedirle usar el baño de niñas en su escuela, en lo que activistas dijeron es el primer fallo de su tipo en esta nueva frontera los derechos civiles.

La familia Mathis se quejó después que funcionarios de la escuela primaria Eagleside, en Fountain, dijeron que Coy, de primer grado, podía usar el baño de los maestros o el de la enfermería, pero no el de las niñas.

“Cuando Coy crezca y sus genitales se desarrollen, varios padres y alumnos podrían estar incómodos con que use el baño de niñas”, afirmaba la misiva que leyó la madre, según relata CNN.

El lunes la familia y sus abogados alabaron el fallo de la División de Derechos Civiles de Colorado. Coy, que vestía con un tope de brillos, jeans y zapatillas rosadas, correteó alrededor de un árbol mientras su madre hablaba con los reporteros.

Su futuro va a ser mejor si llegamos a un punto en que no hay nada de qué avergonzarse, dijo Kathryn Mathis, quien señaló que su familia no había buscado una batalla de derechos civiles.

DERECHOS DE IDENTIDAD En momentos que el movimiento de derechos de los gays ha ganado numerosas batallas jurídicas y electorales en años recientes, los activistas tienen esperanza de que el nuevo fallo impulse la lucha de las personas transgénero.

Este es un momento histórico para los derechos de acceso a baños para las personas transgénero, dijo el abogado de la familia Mathis, Michael Silverman, del Transgender Legal Defense and Education Fund (Fondo de Educación y Defensa Legal Transgénero).

Son 16 los estados tienen leyes de protección a las personas transgénero, y permiten que los estudiantes transexuales utilicen el baño del sexo con que se identifican.

PREFERENCIAS La familia Mathis dijo que Coy mostró preferencia desde un principio por cosas relacionadas con las niñas. Cuando tenía cinco meses tomó una manta rosada que era para su hermana Lily. Poco después mostró poco interés en los carros de juguete y la ropa de niños.

Se negaba a salir de la casa si le vestían de niño y se deprimió y aisló. En un momento dijo a sus padres que deseaba que un médico la reparara. Poco después se enteraron que Coy tenía un desorden de identidad de género y se identifica con el sexo opuesto.

Según CNN, su pasaporte e identificación emitida por el estado la reconocen como tal.

Una vez que sus padres la aceptaron como tal, dijeron, Coy salió de su aislamiento.