Por tercera vez en el año cientos de trabajadores de establecimientos de comida rápida detuvieron sus labores por unas horas para protestar por el salario que reciben.

Nueva York, Raleigh, Durban, Chicago, Detroit, Flint, Michigan, Kansas City, Milwaukee, Miami, Fort Lauderdale y West Palm Beach, fueron algunas de las ciudades donde se acató la huelga de trabajadores de fast foods.

Los organizadores de la manifestación convocaron inicialmente a empleados de restaurantes de comida rápida de al menos 100 ciudades, indicó la agencia EFE. Pero solo respondieron en 60 urbes.

El país símbolo de la comida rápida ha visto oído nuevamente las demandas de los empleados de establecimientos como McDonalds, Burger King, Wendys, entre otros. Los manifestantes sostuvieron carteles comunicando su urgente pedido: huelga por 15, indicaban en alusión al incremento de salario de $7,5 a $15 la hora.

En Detroit por ejemplo, donde hay 53 mil restaurantes de comida rápida, decenas de trabajadores abandonaron sus puestos en dos oportunidades para elevar su voz de protesta frente a los fast food más conocidos, como McDonalds, informó usatoday.com

Los organizadores de las manifestaciones denunciaron que anualmente la industria de comida rápida gana hasta 200 mil millones de dólares, con perspectivas de crecer en 12% para el 2018. Sin embargo, los salarios de sus cajeros, cocineros, y meseros están en el borde de la pobreza de acuerdo con los estándares federales, indicaron.

Hasta el momento, no se sabe con exactitud cuantos empleados de los establecimientos de fast food acataron la huelga.