Los hermanos de Ariel Castro, acusado esta semana por la violación y secuestro de tres mujeres durante una década en Cleveland, Ohio (EE.UU.), afirmaron hoy que desconocían la situación en la vivienda y se sienten perseguidos y atormentados.

Pedro y Onil Castro, fueron detenidos por la policía junto al presunto violador fueron liberados al no tener vínculos con el secuestro y violación de Amanda Berry, Gina DeJesús y Michelle Knight.

“PERSEGUIDOS” En entrevista con la cadena televisiva CNN, Pedro y Onil explican que han tenido que ocultarse junto a su madre de 71 años tras recibir amenazas de muerte por internet, y que sus casas han sido atacadas con piedras.

Ambos dicen que al no poder regresar a sus hogares, se sienten atrapados y perseguidos por los medios de comunicación por un delito que no cometieron, y del que no tenían pistas a pesar de tantos años. Además aseguran estar agradecidos porque las víctimas hayan sido liberadas y estén a salvo.

Pedro Castro insistió en que a él jamás se le hubiera ocurrido hacer algo semejante y que, si hubiera sabido lo que estaba haciendo su hermano, llamaría a los policías porque eso no es correcto.

Según CNN, los hermanos divulgarán más detalles, incluyendo la regla que Ariel Castro les imponía al ingresar a su casa.

Las familias de Berry y DeJesús han pedido a la prensa que respeten la privacidad de las jóvenes, quienes han decidido aún no dar declaraciones. Mientras que Ariel Castro sigue encarcelado y vigilado las 24 horas del día ante el temor de que pueda suicidarse.

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Contenido de El Comercio Perú