Uno de los tres centros de investigación que buscan determinar si los restos mortales de Yasser Arafat contienen Polonio emitió hoy, de manera oficial, sus resultados.

La información emitida por el Instituto de Radiofísica del Hospital Universitario de Lausana (Suiza) señala con alta probabilidad de que en efecto el cuerpo del líder palestino contiene altos niveles del químico.

Con esto, la controversia entre Israel y Palestina se ha desatado. La posibilidad del envenenamiento del ex presidente Arafat ha movilizado al actual líder de la Asociación Nacional Palestina (ANP, como se conoce formalmente a Palestina) a solicitar que las investigaciones continúen con el fin de descubrir las razones detrás del fallecimiento del fundador del partido Al Fatah, reportó EFE.

El año pasado Abás designó el año pasado una comisión investigadora para llevar el caso y coordinar el trabajo de los equipos investigadores en Suiza, Rusia y Francia.

El presidente de esa comisión, Taufik Tiraui, ha convocado para mañana, viernes, una conferencia de prensa, y hoy compareció ante el Comité Ejecutivo del partido nacionalista Al Fatah, núcleo de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) fundada en 1964.

La ANP no reaccionará hasta que le lleguen todas las conclusiones de las diferentes fuentes, dijo Tiraui a EFE.

Mientras tanto, en las calles de Cisjordania y Gaza la teoría de la conspiración se ha visto reforzada por el anuncio del instituto suizo, y la población palestina no duda en acusar a Israel de estar detrás del asesinato de su histórico dirigente.

Él no estaba enfermo, pero esto responde a todas nuestras preguntas, aseguró al la viuda de Arafat en una entrevista al canal Al Yazira. Suha fue quien denunció la posibilidad de un complot ante un tribunal francés en julio de 2012.

ISRAEL SE APARTA DE LA POLÉMICA El Gobierno israelí se mantiene, por ahora, al margen de la polémica. Aunque dos de los principales asesores del ex primer ministro israelí Ariel Sharón (quien estaba al frente del Ejecutivo cuando murió Arafat), Dov Weisglas y Raanán Guisin, se han apresurado a alejar las sospechas de Israel.

Weisglas, hombre de confianza de Sharón durante tres décadas, explicó que entre 2001 y 2002 Yasser Arafat fue perjudicial para la política de la región, pero en 2004 ya estaba marginado de la política palestina.

Por su parte, Raanán Guisin señaló que se trata de un tema recurrente en los medios de comunicación y que la política de Sharón una vez que Arafat enfermó consistía en que (Israel) debía apartarse de los acontecimientos.

Arafat murió en un hospital militar de París después de una larga agonía en la Mukata (sede de la gobernación palestina) de la ciudad Cisjordana de Ramala, en la que estaba confinado desde hacía tres años por Israel.