Ankara. El portavoz de la presidencia de Turquía, Ibrahim Kalin, comunicó este jueves al consejero de seguridad nacional de la Casa Blanca, John Bolton, el "malestar" del país después de que quedara excluida del programa de cazas estadounidenses F-35.
"Hemos informado de nuestro malestar", indicó la presidencia turca en un comunicado, en el que añadió que Kalin hizo saber a Bolton que esta decisión era "incompatible con las anteriores declaraciones de los presidentes de ambos países".
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La compra de Ankara del sistema de defensa antiaérea ruso S-400 y el inicio de su entrega la semana pasada provocaron la ira de Washington que teme que pueda revelar los secretos tecnológicos del F-35, deseado igualmente por Turquía.
Estados Unidos estima que los S-400 no son compatibles con los dispositivos de la OTAN, de la que Turquía forma parte.
La Casa Blanca confirmó el miércoles la exclusión de Turquía del programa F-35 argumentando que este aparato "no puede convivir con una plataforma de recopilación de inteligencia rusa que se usará para superar sus capacidades de última tecnología".
El Pentágono dio a Ankara hasta el 31 de julio para renunciar a los misiles rusos, so pena de quedar excluido del programa de fabricación de los cazas F-35, en el que Turquía participa desde su lanzamiento.
Las empresas turcas proporcionan actualmente 937 piezas de recambio del F-35, y son las únicas en producir 400 de estos repuestos. Ya no recibirán subcontratación y su participación en la fabricación del F-35 será atribuida a compañías de otros países.
Fuente: EFE