Un restaurante del sur de California despidió a un mesero después de que el empleado pidió a varios clientes que demostraran que eran residentes legales de Estados Unidos antes de atenderlos.
Brenda Carrillo, de 23 años, dijo que ella y un amigo fueron interrogados por el mesero en el restaurante Saint Marc en Huntington Beach.
Carrillo dijo que más tarde el mesero les pidió a la hermana de ella y otro amigo que le mostraran documentos de prueba de residencia. Ella señaló que las mujeres se quejaron con el gerente y que se fueron. Una de ellas publicó más tarde en línea un relato del incidente.
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El restaurante dijo en un comentario en su página de Facebook que el mesero fue despedido.
Kent Bearden, director sénior de operaciones de Saint Marc, dijo que el restaurante donará el 10% de las ventas del fin de semana a una organización sin fines de lucro que las mujeres elijan.
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