Editorial: Sin Correa

El ltimo domingo, los ecuatorianos acudieron a las urnas para elegir al sucesor del presidente Rafael Correa. Lenn Moreno, candidato oficialista y ex vicepresidente de Correa, ha alcanzado segn el ltimo conteo al cierre de esta edicin el 39,31% de los votos; ms de diez puntos por encima del representante del Movimiento CREO, Guillermo Lasso (28,25%), pero dcimas por debajo de lo que requera para vencer en primera vuelta (40%). Ambos, entonces, debern disputar una segunda vuelta el prximo 2 de abril.

As, el ciclo de Rafael Correa finaliza, llevndose con l un perodo de la historia ecuatoriana en el que el grueso del poder poltico se concentr en la figura presidencial y cuyo legado tiene diversos aspectos, por decir lo menos, lamentables.

Empecemos por el plano econmico. La gestin corresta alcanz ciertos logros, como el crecimiento del PBI y la reduccin de la pobreza hasta el 2015. No obstante, vale hacer dos precisiones. La primera, que el modelo de crecimiento ecuatoriano se basa en el enorme gasto pblico, que fue posible solo gracias al boom del precio del petrleo y al endeudamiento fiscal. Hoy, con otros precios y habindose desacelerado drsticamente la inversin privada (entre el 2002 y el 2006 creci solo 3%), es esperable que Ecuador enfrente un fuerte frenazo. De hecho, la administracin entrante deber lidiar, segn proyecciones del Fondo Monetario Internacional (FMI), con un segundo ao consecutivo de contraccin en el 2017.

La segunda precisin que vale la pena hacer es que el crecimiento econmico durante el rgimen saliente no fue remarcable si lo vemos en perspectiva: de acuerdo con cifras del FMI, entre el 2000 y el 2006, antes de Correa, la economa creci 4,2% anual en promedio, mientras que entre el 2007 y el 2016, con varios aos de bonanza petrolera, se creci un promedio anual de 3,25%. Qu tipo de gobierno crece menos que en el pasado contando con muchos ms recursos? Por otro lado, si bien la pobreza (segn las ltimas cifras del Banco Mundial) cay 13,4 puntos porcentuales entre el 2007 y el 2015, solo entre el 2000 y el 2006 cay 26,8 puntos. En otras palabras, parece que la revolucin ciudadana de Correa consisti en reducir la velocidad con la que la pobreza disminua en su pas.

El gobierno de Correa tampoco ha estado exento de escndalos de corrupcin. Al destape del Caso Petroecuador que involucra al actual vicepresidente y candidato oficialista al mismo puesto, Jorge Glas le siguieron en diciembre ltimo las revelaciones realizadas por Marcelo Odebrecht sobre coimas que la constructora habra pagado para obtener beneficios en ese pas. Segn un documento del Departamento de Justicia de Estados Unidos, la empresa brasilea ha reconocido que entre el 2007 y el 2016 (perodo del gobierno corresta) desembols ms de US$33,5 millones en sobornos a altos funcionarios del gobierno ecuatoriano.

Pero, sin duda, la mancha ms grande que deja Correa es el atropello general a la libertad de prensa. Como se recuerda, el mandatario se caracteriz por un discurso custico contra varios medios informativos, a los que vilipendi pblicamente y acus en ms de una ocasin de propagar informacin falsa. En el 2013, la promulgacin de la Ley de Comunicacin revisti esta persecucin a la prensa con un marco legal y permiti que, hasta el momento, se emitieran 478 sanciones contra medios y periodistas en ese pas, segn reportes de la ONG Fundamedios.

Este mismo organismo, adems, ha recalcado que a la fecha el gobierno controla 43 medios de comunicacin de manera directa y otros 300 de manera indirecta. Por lo mismo, en abril del 2016, la Sociedad Interamericana de Prensa consider que en Ecuador se han perdido las garantas de la libertad de expresin en todos los espacios y medios de comunicacin. Y organizaciones como Human Rights Watch han denunciado el hostigamiento del gobierno contra sus opositores, as como alertado sobre la arbitrariedad en la tipificacin de los delitos de terrorismo y sabotaje, hoy utilizados como mecanismos contra crticos que participen en actos pblicos de protesta.

Existe la esperanza de que un gobierno sin Correa pueda desajustar la soga que an hoy asfixia a la libertad de prensa en Ecuador y devuelva al pas al camino de un crecimiento real y saludable. Lamentablemente, de resultar vencedor el candidato oficialista, ser difcil que esto ocurra.