El 31 de enero empezó una marcha tras la suspensión de la firma de la adenda de Chinchero. Esta medida será retomada en las próximas horas en Cusco. (Archivo El Comercio)
El 31 de enero empezó una marcha tras la suspensión de la firma de la adenda de Chinchero. Esta medida será retomada en las próximas horas en Cusco. (Archivo El Comercio)
Miguel Neyra

El 30 y 31 de mayo se desarrollarán tres protestas en la región Cusco. Las dos primeras están relacionadas con la reciente cancelación del contrato del aeropuerto de Chinchero por parte del Ministerio de Transportes y Comunicaciones.

La Federación Departamental de Trabajadores de Cusco (FDTC) acordó anoche, en una sesión de casi 5 horas de duración, acatar un paro preventivo de 24 horas el próximo 30 de mayo.

Los organizadores exigen al gobierno que defina, en el más corto plazo, en cuánto tiempo se hará realidad el proyecto del Aeropuerto Internacional de Chinchero.

El Frente Único de Defensa de los Intereses de Chinchero también aprobó para el miércoles 31 una huelga indefinida referente al este tema.

Protestas en Urubamba
Ambas manifestaciones coinciden con la que llevará a cabo Frente Único de Defensa de los Intereses de la Provincia de Urubamba (Fudipu) los días 30 y 31.

El Fudipu exige al alcalde de Urubamba, Humberto Huamán, desconocer el contrato de concesión por 30 años a la empresa Consettur que traslada a los turistas de Aguas Calientes a la ciudadela inca de Machu Picchu.

También hay reclamos contra el hotel Tambo del Inca, a quien acusan de haberse apropiado de una calle de la ciudad, hecho que los administradores del hotel niegan.

El jefe de la Región Policial Cusco, coronel PNP José Alcántara, ha informado que la PNP garantizará la transitabilidad de los turistas a los sitios arqueológicos cusqueños, entre ellos la ciudadela inca de Machu Picchu.


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