Tantas veces Héctor Becerril [CRÓNICA]

Tan mordaces en las redes sociales como en la vida real, las diatribas del parlamentario fujimorista Héctor Becerril coquetean a veces con la difamación. Enemigos, se los ha ganado: Julio Arbizu y Daniel Urresti cuentan entre los irreconciliables. Y el lunes en la noche, colocó entre sus víctimas a la ex candidata presidencial Verónika Mendoza (Frente Amplio). A través del Twitter, Becerril compartió una imagen en la que pronto se advertía que algo no cuadraba: Era un ‘selfie’ grupal, en el que aparecía Mendoza, una botella de vino, sonrisas y –donde debía haber una pared o una ventana– una bandera de un rojo encendido con la hoz y el martillo.

Héctor Becerril acompañaba la imagen con la siguiente inscripción: “Verónika Mendoza: ‘Nos quieren estigmatizar como terroristas’. ¿Y la bandera roja con la hoz y el martillo de SL [Sendero Luminoso] que te encanta?”.

—Abusar del Photoshop—
Los usuarios del Twitter no tardaron en darse cuenta de lo que sucedía. Era una foto trucada: el esposo de Mendoza, Jorge Millones (autor del ‘selfie’), había sido suplantado por un personaje no identificado, y donde, efectivamente, había una ventana, aparecía, inexplicable, la bandera roja.

El abogado del IDL Carlos Rivera no demoró en dar su diagnóstico: “La bajeza de Becerril traerá consecuencias”. El esposo de Mendoza parecía estar en la misma línea: “¿Se puede demandar a un congresista por esto?”, se preguntó Millones en su cuenta de Facebook. “Lo que está haciendo [Becerril] es difamar porque sabe que tiene garantizada la impunidad”, prosiguió. La congresista electa Marisa Glave (Frente Amplio) optó por la ironía: “Tengo una duda seria. ¿Deberíamos demandarlo o recomendarle unas pastillas contra las alucinaciones?”.

En entrevista en Radio Exitosa, Héctor Becerril aseguró que solo se percató de que la foto era trucada cuando los tuiteros se lo hicieron notar. Sin embargo, negó que sea un caso de difamación. “Eso no es una mentira. Podrá ser una equivocación, pero bajo ningún punto de vista es una mentira”.

Pero Mendoza parece decidida a ir a fondo en este asunto: “¿Este es el fujimorismo “renovado” y “democrático”? ¡Por favor! Mintiendo, difamando, trucando audios y ahora fotos, al más puro estilo fujimontesinista”, escribió la ex candidata en  Facebook. “Si creen que esto va a quedar impune, se equivocan”, advirtió.

Pero, claro, como ha hecho notar su esposo, Héctor Becerril tiene inmunidad parlamentaria, y solo se la podrá levantar el Congreso donde el fujimorismo es mayoría.

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