A pesar de que fue su bancada la que frustró su presentación en la Comisión de Fiscalización, el ex presidente Alejandro Toledo se defendió e indicó que ni siquiera lo dejaron saludar a los miembros del referido grupo legislativo, que lo investiga por la formación de la empresa Ecoteva y las dudosas compras inmobiliarias de su suegra.

En conferencia de prensa, Toledo Manrique agregó que no está de acuerdo con la decisión de la comisión de abrirle una investigación, pero reiteró que la respeta.

“He venido a expresarles con mi presencia mi voluntad de colaborar absolutamente con todo lo que la comisión crea pertinente. Y voy a venir cuantas veces me cita la comisión, espero que no me citen mucho porque no hay (dinero)”, manifestó en la sede del Parlamento acompañado por la bancada y dirigencia de su partido.

El ex jefe de Estado dijo ser el primer interesado en que el Caso Ecoteva “se esclarezca” y, añadió, que la reprogramación de su citación no constituye una maniobra política.

“El presidente de la comisión me invitó a ingresar a la sala, me hubiera gustado estrechar la mano de cada uno de los miembros del grupo por más diferencia que tengamos partidariamente, pero ni siquiera eso se me ha permitido. Yo no tengo ningún problema (en declarar), el Perú está primero y todos los peruanos somos iguales, esta no es ninguna maniobra política, pero no me han dejado hablar”, dijo.

Toledo Manrique aseguró que no buscará asilo político en ningún país e incluso bromeó indicando que solamente podría refugiarse en su natal Cabana (Áncash).

Para concluir, reiteró que asistirá al Congreso las veces que se lo pidan y anunció que contratará a un abogado que asuma su defensa ante la investigación que realiza la Comisión de Fiscalización. “No tengo más que decir, sino que esas son las reglas que ellos han puesto, yo no puedo doblegarlos, solo me llevo el sinsabor de no poder haber saludado a los miembros (de la comisión), yo acato su decisión”, acotó.