MILAGROS LEIVA GÁLVEZ

¿Qué piensa de las siete medidas que acaba de anunciar el presidente Humala para que la economía se acelere? El anuncio es importante pues se reconoce la pérdida de velocidad del país, pero son fragmentarias. Bien la número 6 sobre una ventanilla única para los estudios de impacto ambiental, pero la 4 y la 5 proponen resolver algo que no es el principal problema, pues hay abundancia de liquidez para el crédito. La número 2 se refiere al acceso rápido a terrenos para facilitar las obras y es una medida que funcionó bien en el gobierno anterior. Las otras, sobre velocidad de trámites, son positivas, pero dependen del liderazgo que tome directamente la Presidencia de la República en el día a día.

¿No cree que sea un problema de equipo de gestores? No. Es importante la convicción de la jefatura del Estado. En conjunto es el comienzo de una rectificación y eso es positivo. Creo que con nuestra propuesta contribuiremos a una visión más integral. Pero sobre todo se requiere mucha convicción para impulsar la acción en los niveles inferiores y recuperar también en ellos la confianza, pues ahora creen que tomando decisiones se arriesgará acusaciones futuras. En las próximas semanas, consultaremos con algunos dirigentes políticos y sociales para integrar nuevos conceptos de aporte común al Gobierno para que nuestro país aproveche al máximo la gran oportunidad internacional que se le presenta y pueda crecer más del 8%, reducir más velozmente la pobreza y crear mucho más empleo. Esa es nuestra responsabilidad.

¿Entonces, es verdad que usted está trabajando en un planteamiento para el gobierno? Sí. Con un grupo de personas que gobernó el Perú del 2006 al 2011 estamos haciendo un planteamiento para ver cómo aprovechamos esta situación mundial a favor del Perú y cómo logramos crecer más allá del 8%. Vamos a proponer y enviar al Gobierno el 6 de junio un documento con nuestro planteamiento afirmativo, no alternativo, de cómo hacer las cosas mejor en inversión, seguridad y educación.

¿Humala ha perdido el tiempo? Siento que se tiene muchísimo que hacer. Hablemos de inversión. Hay una ley o decreto legislativo dado por mi gobierno que permite que una empresa, en vez de pagar los impuestos que van al poder central y vuelve a la región y al municipio, se ponga de acuerdo con la región y el municipio y haga directamente la obra bien supervisada por los organismos públicos, en un precio y en una calidad, pero que la haga con la velocidad que saben hacerlo. De esta manera este sistema de obras por impuestos podría facilitar que se hagan muchísimas obras en el Perú rápidamente, en vez de demorarse dos o tres años, como se demoran. Sabemos que hay más de 500 ofertas para hacer obras, carreteras, escuelas, hasta pequeños hospitales, gracias a este sistema, pero todo eso está detenido. Están opinando demasiadas personas para algo que debe hacerse rápidamente.

¿Hay temor en el Gobierno? En gran parte de la administración mucho temor, porque como todo lo que hizo el gobierno anterior está mal, suponen que dentro de 5 años se dirá lo mismo de ellos y los enjuiciarán. La mejor forma de librarse de ello es no hacer. También hay un criterio ideológico de intromisión del Estado en todo, hasta en la comida: no coma grasas. Van a terminar prohibiendo los chicharrones del puente de Lurín, ya lo verá.

Usted fue autor del perro del hortelano, ¿qué cree ahora de la consulta previa? La Ley de Consulta Previa no es ley, es un acuerdo internacional 169 de la OIT, de manera que ya no hay posibilidad de decir estoy o no estoy de acuerdo. Lo que hay que hacer es acotar bien el tema y ponerle plazos. Pero si usted declara que la agrupación de vecinos de Los Olivos también es una comunidad nativa que debe opinar sobre una calle que cruza, opinarán y se tomarán su tiempo, las calles se retrasarán dos o cuatro años, hasta que el inversionista se canse y diga ya no hago nada.

¿No está caricaturizando? No. ¿Por qué se fue el señor Lanegra? ¿Cuáles son los criterios para reconocer un pueblo originario, autóctono? Se extendieron a las cinco mil comunidades y parcialidades del país. A ver, haga usted una línea de tendido eléctrico que pasa por 20 distritos y 60 comunidades. ¿Cuándo la pone? Ni siquiera pueden hacer la hidroeléctrica.

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