El primer ministro, Juan Jiménez Mayor, sostuvo hoy que el Gobierno espera recibir “señales claras” de las autoridades de Cajamarca de que “van a deponer cualquier acción de fuerza, que implique disturbios o la afectación de los derechos de la ciudadanía” para levantar el estado de emergencia en esa región, como lo recomendaron los padres Miguel Cabrejos y Gastón Garatea.

“El planteamiento señalado [por los sacerdotes] establece la necesidad de que las autoridades de Cajamarca den señales claras que van a deponer cualquier acción de fuerza, cualquier acción que implique disturbios o la afectación de los derechos de la ciudadanía. Si en Cajamarca existen esas garantías para levantar el estado de emergencia, el Gobierno lo va a hacer”, manifestó.

Durante una conferencia dada en el Congreso de la República, Jiménez Mayor detalló que estas señales constituyen el respeto a la paz, orden social y que los pobladores puedan ejercer en pleno sus derechos fundamentales. “Esperamos que en Cajamarca tengamos esa tranquilidad que requiere el país”, añadió.

El jefe del Gabinete exhortó a las autoridades cajamarquinas no abandonar el diálogo establecido con Cabrejos y Garatea.

EMBARGO A PROSENDERISTA En otro momento, el primer ministro reiteró que el Gobierno no permitirá que “ningún seudomaestro” que haya sido condenado por delitos de terrorismo, corrupción, narcotráfico y violación pueda ingresar a la nueva ley de desarrollo docente.

También resaltó el embargo que lleva a cabo la Procuraduría Antiterrorismo en contra del abogado de Abimael Guzmán, Alfredo Crespo, sentenciado por terrorismo y obligado a pagar una reparación de 30 mil soles.

“Así como no hubo impunidad en el ámbito de la corrupción también tenemos la decisión de que los terrorista que le deben al Estado 3 mil 850 millones de soles paguen”, dijo.

Finalmente, Jiménez le pidió a las fuerzas políticas del Congreso aprobar el pedido hecho por el Ejecutivo para legislar en temas de defensa nacional y en la reforma de la Policía Nacional.