Beneficiados por conmutaciones de Facundo Chinguel reinciden

La Comisión de Indulto y Derecho de Gracia que presidió Miguel Facundo Chinguel —durante la segunda gestión presidencial aprista— conmutó penas a 1781 sentenciados por robo agravado, de los cuales varios han vuelto a delinquir.

El programa dominical "Cuarto Poder" reveló anoche que, como parte de la política de deshacinamiento del segundo gobierno de Alan García, el grupo encabezado por Miguel Facundo Chinguel facilitó la liberación de asesinos, extorsionadores, 'marcas', raqueteros e integrantes de bandas de crimen organizado.

Según sostiene la nota periodística presentada ayer, uno de los beneficiados con estos beneficios fue José Luis Ardiles, quien fue sentenciado por usurpación de autoridad y robo agravado en 1999. Con base en ello, Ardiles fue sentenciado a 15 años y 6 meses de prisión, sin embargo cinco años antes de que venza su condena, obtuvo su libertad.

La resolución suprema que lo devolvió a las calles fue firmada por la entonces ministra de Justicia, Rosario Fernández, y por el ex presidente Alan García, previa evaluación de Miguel Facundo Chinguel.

A pesar del beneficio que se le otorgó, en mayo del 2014 Ardiles se hizo pasar por un presunto comprador de inmuebles, amenazó a Carlo Sialer, dueño de una propiedad en venta, y le exigió —ya dentro de la vivienda— entregarle todos los objetos de valor.

Como consecuencia de esto, Ardiles forcejeó con Sialer y le disparó, hiriéndolo en la pierna, e incluso lo amenazó con matar a su hija. Luego de ser capturado por la comisión de este delito, volvió a la cárcel por el mismo crimen por el cual fue sentenciado en 1999.

Así como José Luis Ardiles, Yhonatahn Férnandez Dávila, Jean Casimiro Cavero y Debinzon Pisco Sánchez también fueron condenados por robo agravado, recibieron gracias por parte de la comisión liderada por Miguel Facundo Chinguel, y luego reincidieron por delitos similares, o incluso más graves, por los cuales se les conminó a la cárcel en un primer momento.

"Se está pensando que el penal es un depósito en el que uno va a sacar de circulación al delincuente por buena cantidad de años, pero en el fondo no se está solucionando el problema sino que les están dando cinco, diez, quince de capacitación para volverse más delincuentes de lo que eran", sostuvo Fernando Castañeda, representante de la Defensoría del Pueblo.

En línea con esto, indicó que casos como el de Ardiles se ven frecuentemente, y que es sumamente grave que no haya un monitoreo de las personas que fueron liberadas por las mencionadas gracias presidenciales.

"Tiene que haber un programa de post liberación de la persona. La evaluación es clave, porque es la puerta de salida. Todo factor que ponga en riesgo la seguridad ciudadana puede ser considerado como un atentado contra la estabilidad de la sociedad", añadió.

Por su lado, el director de la Comisión de Gracias Presidenciales del Ministerio de Justicia, Freddy Cárdenas, cuestionó el criterio de evaluación utilizado por el grupo que presidió Miguel Facundo Chinguel para liberar a delincuentes.

"Está prohibido [en este momento] recomendar conmutaciones de pena a reincidentes. Ahora se les realiza seguimiento, no obstante no existe control de quienes fueron liberados antes", zanjó.

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