La ciencia puede ayudar a cumplir los propósitos de Año Nuevo

Todos los años es lo mismo: por Año Nuevo muchos se proponen bajar de peso, abandonar el cigarro, pasar más tiempo con la familia, ser más activos. Sin embargo, estas promesas solo duran un par de semanas en el mejor de los casos. Pero en Facebook apareció un "salvavidas". 

El sitio "Pictoline" compartió un cartel en el que explica que, gracias a la psicología, los propósitos de Año Nuevo si pueden lograrse. Basta con seguir una serie de siete sugerencias para lograr el objetivo. 

Así, lo primero es escoger solo un propósito en cual enfocarse, una que se desee hacer y no algo 'de moda'. Este tiene que ser contado a la familia o amigos para que la "la presión social ayude". El objetivo se tiene que dividir en metas con un plazo cada una. Lo ideal es que al llegar a cada meta tener alguna recompensa. 

"Pictoline" explica que "es casi seguro que fallarás más de una vez, pero no te rindas, tú puedes lograrlo". Aunque cabe precisar que la "fuerza de voluntad" no es uno de los pasos que se requieren para lograr las resoluciones de Año Nuevo, según precisó el portal web empresarial "Inc".

Las sugerencias del sitio en Facebook "Pictoline" fueron basadas en el artículo del mencionado portal "10 Steps to Achieve Your New Year's Resolutions" (10 pasos para lograr las resoluciones de Año Nuevo). Estos pasos fueron desarrollados y explicados por el psicólogo británico Richard Wiseman.

En 2007, Wiseman encuestó a tres mil personas sobre sus propósitos de Año Nuevo. Halló que solo el 12% pudo legar a su objetivo. Sobre quienes tuvieron éxito realizó un estudio sobre los métodos que siguieron. Dicha investigación concluyó en diez pasos que hay que seguir uno detrás de otro y como simples sugerencias aleatorias. 

Hacer una sola resolución. Luego pensar en esta por adelantado, con tiempo para reflexionar. El tercer paso es no pensar en los fracasos pasados y enfocarse en el nuevo objetivo. Esto deriva en concentrarse en algo que se quiere realmente -no por moda-.

El quinto paso es establecer metas con plazos específicos. Luego contarle a sus amistades sobre su propósito para que le ayuden con el miedo al fracaso. Crear una lista de verificación y anotar las mejoras en su vida con cada meta. Y recompensarse con cada meta alcanzada.

Los últimos dos pasos son sencillos: elaborar un documento que apunte el progreso del objetivo final y, finalmente, no lamentarse si se renuncia en algún momento al propósito o si cae en los viejos hábitos, "solo hay que tratarlo como un contratiempo".
 

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