Google habría intentado comprar Snapchat en 2016 y seguiría muy interesado hoy en día

La posición de Google dentro de la industria tecnológica está consolidada y desde ese contexto es que la compañía maneja una política de adquisiciones destinada a captar el talento e innovaciones presentes en empresas emergentes o con menos tiempo en el mercado.

Un reciente reporte del medio estadounidense Business Insider señala que el gigante de Internet habría intentado adquirir a Snapchat durante 2016 por una cifra enorme y que esta última firma rechazó esta oferta.

Tres fuentes distintas de la compañía confirmaron que a inicios del año pasado, la red social con un fantasma en su logo recibió una propuesta de adquisición que rondaba los 30.000 millones de dólares por parte de Google.

No es la primera vez que Snapchat dice que no a una oferta de este tipo, pues en 2013 hizo lo propio con una oferta de 3.000 millones por parte de Facebook, en una época en la cual todavía se encontraba en crecimiento. También corre el rumor de que poco después del intento de compra de la firma de Mark Zuckerberg, Google elevó la suma a 4.000 millones de dólares.

No obstante, la cifra del reciente reporte multiplica diez veces la de Facebook y según señalan las fuentes del medio norteamericano dicha oferta sigue en pie.

Cuando Snapchat salió a cotizar a la bolsa, lo hizo con un valor estimado en 22.200 millones de dólares, pero este actualmente ha caído a los 15.000 millones.

Estos problemas van de la mano con el estancamiento del crecimiento de usuarios activos de la red social, en gran medida debido al auge de Instagram Stories, característica que Facebook copió a Snapchat y ha venido introduciendo en todas las plataformas que tiene en propiedad.

Es en ese contexto que Google mantiene la oferta, ya que el presente de Snapchat es complicado por la migración de usuarios activos a Instagram, que además de ofrecer un público más amplio a los anunciantes, se enmarca dentro de las políticas de publicidad de Facebook, mucho más definidas que las de sus competidores.

De momento parece complicado que Spiegel acepte cualquier negociación, pero con la gran oferta todavía rondando por sus oficinas, todo podría pasar.