"Game of Thrones" 7x05: los detalles del episodio [SPOILERS]

"Game of Thrones" reniega de las convenciones de la caballería en un mundo cruel, un mundo en el que reina el azar y casi nada sale como se planea. Eso cambia en el episodio 7x05, "Eastwatch" ("Guardiaoriente"), donde los personajes se topan con escasos obstáculos.

A continuación, spoilers:

En los primeros minutos de "Game of Thrones" 7x05, Daenerys Targaryen (Emilia Clarke) ejerce "justicia" con los vencidos: o están con ella o están en su contra. En el segundo bando están Randyll y Dickon Tarly, quienes se niegan a hincar la rodilla y por ello mueren en las llamas de Drogon. Tyrion Lannister (Peter Dinklage) intentó salvarlos sin éxito.

Con los Tarly fuera de juego, el heredero de la casa es Samwell (John Bradley-West). Como en Oldtown ignoran sus advertencias sobre el Rey de la Noche, se va; presumo que a Winterfell o el mismo Muro. Antes de fugar saquea los libros relacionados a la Larga Noche; guerra mitológica de los Primeros Hombres, gigantes y niños del bosque contra los Caminantes Blancos.

En Winterfell, Bran Stark (Isaac Hempstead-Wright) usa sus habilidades de warg para controlar a los cuervos y observar más allá del Muro, a la altura del castillo Eastwatch by the Sea, donde encuentra al ejército de los muertos. La alerta llega a Jon Snow (Kit Harington) y Daenerys Targaryen.

En resumen, Jon Snow, Davos Seaworth y Jorah Mormont (volvió, como era de esperarse) viajan al norte para ejecutar el plan de Tyrion: capturar un wight (muerto viviente), mostrarlo a Cersei y convencerla así de cesar hostilidades cuando un enemigo en común se acerca a matarlos a todos. Con ellos va Gendry, que todos estos años estuvo en King's Landing, oculto a vista y paciencia de la reina.

Cersei (Lena Headey) quiere luchar hasta la muerte de ser necesario. Los dragones no la amilanan, tampoco los Dothraki. Ella acepta la propuesta de Daenerys solo porque planea usar esa reunión como un pretexto para inclinar la guerra a su favor.

En Winterfell, las hermanas Stark pasan por un momento agrio. Sansa (Sophie Turner) tiene un modo de hacer las cosas que no le gusta a Arya, quiere conciliar con los señores del norte. La menor propone matar a los que no estén de acuerdo con las órdenes de Jon.

Arya (Maisie Williams) sigue a Petyr Baelish (Aidan Gillen) y descubre una carta que Sansa envió en la primera temporada, donde le pide a Robb Stark rendirse para asegurar la sobrevivencia de su padre Ned (en ese entonces prisionero del Red Keep). Por supuesto, Littlefinger quería que Arya encuentre esa carta y ahora la confianza entre ambas hermanas ha sido mellada.

Finalmente, la última secuencia de "Game of Thrones" nos lleva al castillo Eastwatch by the Sea, donde Jon encuentra a la Hermandad sin Estandartes, que sigue la visión de las llamas del primer episodio. Todos van por motivos distintos más allá del Muro, unidos por el destino como si fueran esos héroes de las canciones que tanto se cantan en los Siete Reinos, más mito que realidad.

Estamos ante un episodio que sienta bases para cerrar la temporada, dispone los conflictos finales. Los showrunners Benioff y Weiss ya han hecho eso antes, pero ahora el tiro les salió por la culata por dos cosas: demasiada información para tan poco tiempo y demasiados viajes, pues tenemos a personajes que van de Dragonstone a King's Landing, de King's Landing a Dragonstone y de allí al extremo oriental del Muro. Seguro pasaron varios días entre viaje y viaje, pero no se nota. Estos son los Siete Reinos, no siete distritos.

Otra consecuencia de colocar tanta información es que momentos cruciales terminan perdidos, como la conversación de Jaime y Tyrion en el sótano del Red Keep. Ambos tenían tanto que decirse, pero todo quedó reducido a solo unas palabras por el armisticio.

Todas las series tienen que terminar y es bueno que "Game of Thrones" no dure para siempre, pero no tiene acabar así, a las patadas. 

PENSAMIENTOS SUELTOS

El mejor momento del episodio : el encuentro cercano de Jon Snow y Drogon. De acuerdo a Tyrion, los dragones saben distinguir a los amigos de sus amos. Puede que por eso Jon no sea un pedazo de carbón o porque tiene sangre Targaryen.

Mi segundo momento favorito: la sonrisa de Cersei al hablar del hijo que espera con Jaime. No la había visto así desde antes de la muerte de Joffrey, una sonrisa que te hace adorarla, pero también temerle.

¿Si Jon y Davos fueron más allá del Muro, les convenía pasar antes por Winterfell? No, pues ellos van al extremo oriente, para lo cual el mar es mejor ruta.

¿Cómo así Bronn llevó de una orilla a otra a Jaime Lannister, quien no solo debe pesar sus 80 kilos, sino que tiene armadura? ¿Magia?

Tampoco me convence el cómo Sam y Gilly encuentran la anulación del matrimonio de Rhaegar Targaryen y Elia Martell de manera tan casual. Más inverosimilitud.

Recordatorio: Rhaegar, hermano mayor de Daenerys y Viserys, se llevó a Lyanna Stark y desató así la rebelión de Robert Baratheon.

Con tal anulación, Jon Snow pasa a ser un Targaryen legítimo. La pregunta es si su derecho al trono es o no más fuerte que el de Daenerys.

"Pensé que todavía estabas remando". Davos Seaworth a Gendry. Bien jugado, Benioff y Weiss. Bien jugado.

Vi pena en el rostro de Tyrion cuando Jaime menciona a Tywin, pero me hubiese gustado encontrar una mención a Shae, a la que también mató el enano. Al menos en las novelas George R.R. Martin trabaja la mente de Tyrion, quien se muestra destruido por lo que hizo antes de huir de King's Landing.

A estas alturas es innegable que hay atracción entre Dany y Jon. Al menos de ella hacia él.

Ahora que Jon Snow, Jorah Mormont, Tormund Giantsbane, Gendry, Sandor Clegane, Thoros de Myr y Beric Dondarrion han ido al otro lado del Muro para derrotar a Smaug; ¡perdón!, para capturar un wight... ¿alguno de ellos tiene que morir, no?

Gran momento de Sam al verlo abandonar Oldtown. Su lugar es allí, pero también lo es junto al bando que pelea para salvar a todos.

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