(Foto: Pariacaca Camp)
(Foto: Pariacaca Camp)
Redacción EC

Cuando empiezas a planear un viaje, el hospedaje es uno de los detalles al que le prestas especial atención. Si bien siempre buscamos una alternativa cerca de la acción, nunca está de más evaluar la posibilidad de quedarse un poco más lejos del corazón de la ciudad.

Tal vez el viaje sea un poco más largo hasta los lugares de interés o debas volver más temprano por la noche, pero hay varios aspectos positivos de ir un poquito más lejos cuando de dormir se trata.

Te contamos cinco beneficios de hospedarte a las afueras de la ciudad:

1. El viaje es más divertido


Subir al transporte público es una experiencia que debes vivir cuando viajas a otra ciudad. Hospedarte a las afueras de la gran ciudad te obligará a abordar un tren o un bus y disfrutarás de un paisaje diferente a través de su ventana.

2. Es más económico

Si comparas los precios, te darás cuenta que estar solo unos minutos más lejos de la ciudad le hará bien a tu bolsillo. Lo mismo ocurre si optas por Airbnb: entre más lejos del centro de una ciudad, encontrarás alternativas buenas y baratas.

3. Conoces más cosas

Hospedarte un poco lejos te da la oportunidad de conocer lo que esa parte de la ciudad tiene para ofrecer. Podrías encontrarte con sorpresas como un parque hermoso, un restaurante delicioso o una tienda que amas y que nunca hubieras encontrado si te quedabas en otro lugar.

4. Hay hospedajes más grandes

Esto es por si te animas a probar Airbnb. Por ejemplo, un hospedaje barato en un destino puede significar una habitación pequeña, mientras que por el mismo precio podrías encontrar un cuarto mucho más grande en otro rincón de la ciudad. Un poco de comodidad nunca está de más.

5. Porque es más tranquilo


Ruido, autos, luces. Esto puede ser atractivo para algunas personas, pero otras prefieren relajarse en una zona más tranquila en sus viajes. Los barrios alejados de la ciudad son un poco más residenciales y familiares, por lo que podrás disfrutar de un café junto a la ventana escuchando las aves y no las bocinas de los autos.

Contenido Sugerido

Contenido GEC