La modelo revela sus secretos de belleza

Para Jessica Vásquez la clave de la belleza está en una serie de hábitos que cumple desde muy temprana edad. Cuando era adolescente iba a la playa con sus amigas y todas se bronceaban por horas bajo el sol. Ella, en cambio, permanecía bajo una sombrilla, con bloqueador y lentes de sol, cuidándose de los rayos UV. Entonces, tenía contrato con una marca de cosméticos que le pedía seguir al pie de la letra estas recomendaciones para evitar que su piel se manchara. Hoy, a sus 41 años, agradece aquellos primeros consejos que le han permitido seguir trabajando durante más de dos décadas en la industria del modelaje.

Con el paso del tiempo, Jessica se dedicó a diseñar su propia rutina de cuidados para vivir como ella quiere. Su lista incluye una nutrición saludable, tiempo para meditar y placeres como beber un buen café para despertar por las mañanas o darse un baño relajante por las noches. Ahora, inmersa desde hace un año en una nueva aventura laboral en publicidad, cuenta que se levanta feliz, pues cada día tiene algo nuevo que enseñarle.

Empezaste muy joven en el mundo del modelaje, ¿cuál ha sido tu secreto para tener una carrera larga y activa?
Empecé a los 13 años y, desde entonces, mantengo varios hábitos saludables referentes a belleza y nutrición. Eso ha sido fundamental para mantenerme vigente. Obviamente, al comienzo, como cualquier adolescente, me rebelaba un poco, pero a los 15 años firmé contrato con una marca de cosméticos con cláusulas que tenía que respetar, como evitar broncearme, usar bloqueador e ir al dermatólogo. Así, fui consciente de que si quería ser modelo debía cuidarme.

¿Tienes una rutina para conservar tu figura?
No soy de hacer dietas o ejercicios extremos. Tengo una vida saludable porque me gusta, no por obligación. No arranco mi día si no desayuno antes de ir al gimnasio. Es mi comida más fuerte y donde no puede faltar un jugo surtido o un extracto de verduras y frutas, cereales y proteínas, como, por ejemplo, huevos. Tampoco me salto el resto de las comidas, eso es lo peor que se puede hacer.

¿Hay alimentos que sueles evitar por cuidar tu peso y medidas?
No me privo de nada, pero no me gustan las comidas muy aderezadas o con grasas. Tampoco como arroz ni leche de origen animal, porque soy intolerante a la lactosa (opto por la leche de soya, almendra o coco). Además, desde hace cinco años, no como carnes rojas. Es una decisión que tomé para sentirme mejor a nivel físico y emocional, porque la compasión hacia los animales es algo que te hace bien.

¿No tienes placeres culposos?
Me gusta tomar café, me encanta el ritual de prepararlo en la cafetera italiana o en la prensa francesa durante las mañanas. El aroma me despierta. El café no hace daño si es de buena calidad, yo suelo tomar tres tazas. Una para empezar el día, la otra después del almuerzo y la tercera antes de las 5:30 p.m. para que no altere mi sueño.

¿Tienes problemas para dormir?
La verdad, no. Duermo muy bien y me encanta, ese sí es mi verdadero placer culposo y mi secreto de belleza. Necesito dormir ocho horas. Si duermo menos, al día siguiente no me siento bien y se me nota. Me gusta llegar a casa del trabajo y tomar un baño para relajarme. Después de eso, duermo estupendamente.

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