China dio este domingo la bienvenida al acuerdo in extremis logrado en la Cumbre de Durban (Sudáfrica), destacando que cumple con el espíritu del Protocolo de Kioto que Beijing desea prorrogar, pero a la vez lamentó “la falta de voluntad política” de los países desarrollados por reducir sus emisiones.
En declaraciones al diario oficial China Daily, el jefe de la delegación china en la cumbre, Xie Zhenhua, valoró positivamente el consenso logrado, que fija la hoja de ruta para un segundo periodo de limitación de emisiones cuando termine el estipulado en Kioto (2012), aunque pidió a los ricos más sinceridad.
Aunque el acuerdo esta completamente en línea con Kioto, la Hoja de Ruta de Bali y el principio de responsabilidades comunes pero diferenciadas (entre países desarrollados y en desarrollo), no cumple todos los propósitos, ya que todavía no fijó una fecha concreta para un Kioto 2 o las cifras concretas de reducción de emisiones por parte de los países industrializados, dijo Xie.
SINCERIDAD ANTE TODO Esperamos sinceridad política por parte de los países desarrollados el próximo año en Qatar, subrayó Xie, cuyo país es el mayor emisor mundial de gases causantes del efecto invernadero como el CO2
Aseguró que en esos países falta voluntad para reducir las emisiones y transferir tecnología y fondos para apoyar a las naciones en desarrollo.
Esto, recalcó, es el principal elemento que perjudica la cooperación de la comunidad internacional para luchar contra el cambio climático.
El acuerdo se produjo tras maratonianas negociaciones que prolongaron la conferencia en 36 horas y fue recibido con alivio después de que las diferencias entre la Unión Europea (UE), EE.UU., China y la India estuvieran a punto de hacer descarrilar el proceso.