ANÁLISIS: las claves y polémicas en el título de Alianza Lima
ANÁLISIS: las claves y polémicas en el título de Alianza Lima
Redacción EC

HORACIO ZIMMERMANN 

1. La expulsión de Perea. Fue injusta. El árbitro Carrillo no debió expulsar al delantero colombiano, quien realizó un movimiento natural al golpear en la cara a un rival. Eso sí, personalizar la derrota en el error del juez es un argumento débil de quien no tiene capacidad de autocrítica. , sin desconocer los méritos de Alianza Lima, debe enfocar la derrota en sus propias limitaciones, por no haber encontrado solución a las dificultades que el partido le planteó.

2. Los cambios de Uribe. El análisis más fácil es reclamarle al entrenador lo contrario a lo que hizo durante el partido. Más allá de los cambios por nombre –pienso que Montaño no debió salir nunca, incluso fatigado, porque es un especialista para generar faltas y cortar el juego–, el principal error de San Martín fue dejar de atacar cuando ganaba 2-0. Despreció la posesión y cedió el total protagonismo a Alianza. No cambió su estilo (el toque al ras, verticalidad), pero sí varió su táctica (pasó a esperar muy metido en su campo). Julio César Uribe perdió aplicando algo de lo que no está convencido: defender a ultranza sin la pelota en los pies.

3. Premio a la insistencia. A Alianza le costó en todo el torneo cuando tuvo que proponer con posesión de balón. Con la pelota al pie, los espacios para crear son reducidos. Al contragolpe, los espacios son mayores debido a la descompensación del rival. Por eso siempre le fue mejor de vista que de local, cuando tuvo que especular. Ayer a los íntimos les tocó protagonizar con el 2-0 en contra y la solución a sus problemas ofensivos fue el centro al área en busca de sus dos centrodelanteros. O a ver qué pasa. Y así lo empató. Premio a la insistencia de un equipo que no bajó nunca los brazos y siguió atacando. No lo ganó Sanguinetti, sino el corazón de sus jugadores.  

4. ¿Estilo de juego? A lo largo del torneo, el estilo de Alianza fue criticado. Ya no practicaba ese fútbol pícaro, pistero, común de los de La Victoria; ahora priorizaba la fricción, el desprecio de la pelota, el interés por lo que suceda únicamente en las áreas. Este Alianza entendió que para ganar no es necesario merecer. Sanguinetti transmitió esa creencia a sus jugadores y estos la aceptaron. Virtud blanquiazul. ¿Y el estilo? No es uno que despierte admiración –personalmente no es el que me gusta–, aplausos, pero es con el que le bastó para ganar el título. Esto, sumado a que el equipo solo perdió una vez en el campeonato, no obliga al club a una revisión del proyecto. Al final, ningún estilo es mejor que el otro (Italia ganó cuatro mundiales especulando y Holanda ninguno con un fútbol hermoso).

5. El mejor de todos. Marcelo Bielsa dice que de los números no se puede opinar, que son inabordables. Dice que el fútbol es de logros, y los logros de Alianza están evidenciados en los números que consiguió en el año. De hecho, los mejores del torneo. Fue el equipo que más puntos sumó (30), uno de los que más ganó (8), el que menos derrotas tuvo (1), y el que menos goles recibió (11). El resultado fue el campeonato. 

Contenido sugerido

Contenido GEC