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Los dos goles de Martín Cauteruccio y el triunfo de Sporting Cristal, el primero, en esta Copa Libertadores, son una buena noticia. Lamentablemente, la victoria terminó siendo apocada -otra vez- por el conflicto interno que arrastra el cuadro rimense y cuyos síntomas siguen siendo agudos: renuncia de las barras a ir al estadio, plantones en el exterior del estadio alzando su voz de protesta, exigiendo cambios a favor del equipo que aman.
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Hay que decirlo. A pesar que las diferentes facciones de la barra se ausentaron como manera de disconformidad con las decisiones de parte de los dirigentes, en las tres tribunas habilitadas el hincha de a pie, el que va con el hijo, con la esposa, con la familia, no faltó. Se hizo presente y alentó, impulsó al equipo hasta quedarse sin voz.
Aplausos para esos alrededor de 18 mil celestes. Es válida la medida de los que no fueron, pero también es muy respetable los que acompañaron sus colores, los que más allá de los problemas, asisten porque Sporting Cristal está por encima de todo.
Los hinchas, en el Nacional, en los exteriores y en sus casas frente a la TV o el smartphone, sufrieron con el partido. Y en la zona técnica del Nacional, Paulo Autuori, también padecía este típico partido al límite que se juegan en la Copa Libertadores. Hoy se ve a un entrenador brasileño más delgado, con más años, pero igual de expresivo que cuando eran los 2000, igual de enérgico.
Bolívar fue un oponente muy dócil. Al menos en la primera etapa. Ahí es que de arranque, el goleador Cauteruccio aprovechó la más clara que tuvo y con muy buen gesto técnico, la picó ante la salida del arquero para el 1-0. Con el partido recién amaneciendo, antes de los 5 minutos, el 1-0 hizo más fácil todo.
Felizmente. Porque con un equipo con tantos movimientos tácticos de Autuori, unos por necesidad y otros por gusto técnico, a este Cristal le costó jugar. Quizá por eso Gustavo Zevallos anduvo como medio nervioso por la cancha previo al partido. Sabía y sabe que a esta versión con jugadores ya en lista negra y con evidente urgencia de fichajes, todo le costará el doble.
Es más, alrededor de 20 barristas compraron su entrada para acceder a la tribuna de Occidente y reprochar a la plana directiva que estaba presente en esta zona del Nacional. Felizmente la policía reaccionó e intervino porque más allá de la justa protesta se debe evitar la violencia.
Casi al mismo tiempo, Cauteruccio marcaba el 2-0 en la cancha para el festejo de los buenos hinchas. Aunque a los 73 minutos de juego, Vaca aprovechó la débil marca y con tiempo y espacio sacó un remate precioso para el 2-1.
Así fue como los últimos 20 minutos fueron de padecer para los celestes y de mucho renegar para Paulo Autuori, que se desvivió dando indicaciones y siendo muy estricto en el plano táctico con sus jugadores.
Autuori no aguanta pulgas. Sacó a Sosa porque se equivocó en una cobertura. Se quedó sin voz de tanto gritarle a Romero. Aunque también tuvo voz para el elogio y el aliento, como a ‘Canchita‘, que ayer corrió como nunca y se le notó muy entregado y comprometido. Solo le falta la regularidad en el nivel, la cual debería alcanzarla con un entrenador de experiencia con la que cuenta ahora en La Florida.
La barra seguía en los exteriores del Nacional, con banderolas dedicadas a Innova Sports, empresa dueña del club rímense, y a Joel Raffo, presidente de la institución. Adentro, el hincha, sin poder sentarse, padecía cada ataque de un Bolívar que en sus cuatro partidos ha mostrado un buen juego, pero que le cuesta lograr el equilibrio entre ataque y defensa.
Los últimos seis minutos, los de agregado, Cristal los jugó en su área, defendiendo como sea el resultado ante un conjunto boliviano que, felizmente, se conducía con más ganas que ideas. Ganó Cristal pero Autuori sigue teniendo mucho por resolver. No obstante, no hay nada mejor que seguir ajustando diversos detalles en un ambiente ganador como el que ha logrado el cuadro del Rímac.
Con el triunfo, Cristal suma 4 puntos en el Grupo G y se ubica tercero. El mismo puntaje tiene Cerro Porteño, pero segundo por diferencia de goles. Justamente, el ‘Ciclón‘ es el siguiente rival de los celestes, este martes en el Estadio Nacional. Un triunfo acercaría a la SC a octavos de final, con un equipo que hace unas semanas no tenía ni la más mínima opción de pensar en sumar puntos en la Copa por el discreto nivel. En tanto, último es Bolívar con 3 puntos y primero, ya clasificado a la siguiente etapa, es Palmeiras con 12 unidades.
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