Eliezer Benedetti

Stefano Peschiera navega por aguas turbias, carente de amparo (del IPD) y sin un destino garantizado. Él, desatendido a lo largo del año por quienes deberían resguardarlo -sin embargo-, ha podido sacar a flote una conquista dorada que dedica con mucho orgullo a nuestro país. En medio de su turbulenta aventura, pudo llevar su embarcación a buen puerto. Pero esto es solo el inicio del final feliz que busca en un ciclo olímpico prometedor.

Contenido Sugerido

Contenido GEC