Sporting Cristal: el joven Paulo que se despide del Gallardo

Eliezzer Benedetti

Al disputar un partido de fútbol, muchos jugadores colocan toda su fe sobre el terreno de juego. Sin embargo, esta misma creencia puede hacer alejarlos del verde. Es el caso de Paulo Gallardo, la joven promesa del Sporting Cristal.

Con 18 años y un gran futuro por delante, Paulo decidió dejar el club cervecero, que le dio la oportunidad de debutar en primera división tras la lesión de Emmanuel Herrera. El joven delantero había firmado contrato por los rimenses a inicios de abril hasta el 2021.

Sin embargo, sus convicciones religiosas han podido más que el encanto del fútbol. Según "RPP", Paulo rescindió su contrato de mutuo acuerdo con el club el pasado lunes 5. Probablemente, el atacante, que pertenece a la Iglesia mormona, regresará al fútbol profesional en dos años cuando termine su misión religiosa.

-Talento a la espera-

Paulo Gallardo se perfilaba como una promesa del torneo local y sobretodo del Sporting Cristal. La sangre celeste recorre todas sus venas y el ADN goleador que posee le permitió debutar este año con el club cervecero. No obstante, por más que los dirigentes rimenses intentaron convencerlo, la decisión de Paulo fue la que menos esperaban.

El joven delantero nació para jugar en el Rímac. Incluso, le hace honor a su apellido, el mismo que lleva el máximo ídolo del Sporting Cristal, Alberto Gallardo. Por ello, no es casualidad que la apuesta de Claudio Vivas por él haya funcionado.

Paulo disputó cuatro partidos oficiales vistiendo la celeste y logró anotar un gol. Su primera y única conquista la ejecutó en el triunfo (3-1) de Cristal sobre Deportivo Binacional. El joven, con la mirada hacia el cielo, atinó a celebrar agradeciéndole a Dios.

Asimismo, el delantero perteneció a la selección peruana Sub 17 que nos representó en el Sudamericano de la categoría en 2017. Ricardo Gareca también lo vio con buenos ojos a Paulo, cuando con la Sub 18, el delantero disputó un partido amistoso contra la selección absoluta.

De esta manera, el Sporting Cristal tiene otra baja en la ofensiva. Ha perdido un gran talento, del cual podía explotar por los siguientes años. Ahora, los rimenses tienen que seguir mirando su cantera para descubrir otro joven con la misma capacidad de Paulo.

-Otros casos-

La fe es lo último que se pierde y lo que más tienen presente algunos futbolistas. Por ello, así como Paulo Gallardo, otros futbolistas también han sido influenciados por sus creencias para tomar una decisión en su carrera del balompié.

Johan Vonlanthen

Quizá es el caso más representativo de la influencia de la religión en el fútbol. El colombiano-suizo, Johan Vonlanthen, es reconocido por ser el jugador más joven en anotar en la Eurocopa, tras el gol que le marcó a Francia en el 2004, con 18 años y 141 días cumplidos.

Pasó unas pruebas en el Real Madrid, pero lo rechazó. De pronto, en el peor momento de su vida y carrera, el futbolista se introdujo a la religión, específicamente a la adventista. Esta corriente religiosa limitó su actividad futbolística, pues tenía prohibido jugar los sábados.

Por ello, Vonlanthen rechazó jugar los sábados, por lo que en Europa-aunque intentaron- no pudieron concederle su pedido. Sin embargo, en 2011 encontró un espacio en Colombia, con el Itagüí Ditaires, donde sí podía sobrellevar el fútbol y sus creencias. Pese a ello, intentó retirarse en 2012, pero no lo hizo definitivamente hasta el 2018.

Víctor Turcios

Otra historia similar es la de Víctor Turcios. El salvadoreño tenía un gran talento con el balón en los pies y anunciaba una exitosa carrera por delante. Sin embargo, decidió emprender su camino hacia Jesús y dejó atrás la fama que le suponía como futbolista.

Tras llevar una vida cristiana, Víctor Turcios, excapitán de la selección salvadoreña, denunció los amaños de partidos que vio en sus compañeros. No podía ser cómplice del engaño y, tras todas las experiencias que vivió en el balompié, decidió retirarse en 2015 con 27 años. Actualmente, Víctor es pastor evangélico.

Carlos Roa

También podemos nombrar a Carlos Roa. El portero argentino, recordado por ser el héroe del encuentro de cuartos de final del Mundial 1998 entre Argentina e Inglaterra, se retiró en el mejor momento de su carrera por asuntos religiosos.

Roa vestía la camiseta del Mallorca de España, donde brilló y llamó la atención en todo Europa. Manchester United elevó su pretensión al portero, pero este le rechazó la oferta para posteriormente retirarse del fútbol. "He sido un mal cristiano. Hay que tener fe, agarrar la Biblia y saber dejarte guiar por Dios. Uno de los motivos por los que me voy es por el sábado, el séptimo día, un día sagrado", así Carlos explicó a los medios su retirada con 29 años.

Sin embargo, Roa retornó al terreno de juego luego de una temporada con la condición de no jugar los sábados. Le dijo el adiós definitivo al fútbol en 2004, vistiendo la camiseta del Albacete.