El Congreso aprobó ayer por insistencia la ley que fija topes de tasas de interés del sistema financiero y determinó que el Banco Central de Reserva (BCR) será quien establezca los límites máximos, cada seis meses, que podrá cobrar la banca por sus préstamos.
Esta nueva norma se aplicará exclusivamente para préstamos de consumo igual o menor a 2 UIT (S/ 8.800) y para créditos a mypes.
Ahora se espera que el Gobierno recurra al Tribunal Constitucional (TC) para que se declare inconstitucional la ley. De no prosperar ese pedido, el economista y exgerente del BCR, Enrique Díaz Ortega, indicó que esta entidad estatal va a tener que obedecer lo que dice la norma.
En este sentido, el especialista indicó que el BCR debe buscar un fundamento técnico porque entramos en un tema que puede contradecir las reglas del mercado.
“Cuando pones topes a las tasas de interés, en algunos casos, sería relevante porque son están a niveles muy altos, pero hay otras situaciones en que no son tan altas y fijar un límite hará que se distorsione la asignación de recursos”, comentó.
Agregó que es una medida contraproducente para la inclusión financiera. “El BCR tiene que ser muy técnico para evitar que sea un ajuste excesivo para presionar al mercado”, precisó.
Por su parte, el exjefe de la SBS, Juan José Marthans, mencionó que a nivel institucional no existe duda de la capacidad del BCR para efectos de minimizar el daño que se puede generar por esta autógrafa que protege de la usura a los consumidores de los servicios financieros.
“El BCR va a tener la libertad de reducir el impacto negativo de la propuesta, también es cierto que no podrá evitarlo. Ahora es inminente el cambio del directorio de esa institución y el nuevo presidente va a tener que elegir bien para que puedan minimizar daños en la economía con este tipo de normas”, precisó.
Además, comentó que el BCR tiene que tomarse su tiempo para medir calidad y no emitir ninguna acción concreta, mientras el TC toma una decisión.
SE DEBIÓ TOMAR OTRAS MEDIDAS
De otro lado, Marthans recalcó que el Congreso está alimentado las posibilidades de negocios del frente informal de usura de préstamos en el país.
En esta línea, el exjefe de la SBS mencionó que se debió buscar medidas que promuevan prácticas competitivas para que las tasas de interés del sistema financiero bajen en el mercado local.
“No le costaba nada buscar competencia en el mercado con pilares básicos, como fomentar entradas de bancos internacionales al Perú, desarrollar políticas de transparencias agresivas, evitar el cobro de comisiones, y que las microfinancieras puedan emitir tarjetas de crédito”, detalló.