(Foto: EY)
(Foto: EY)
Claudia Inga Martínez

Las grandes empresas van interiorizando, cada vez más, la importancia de la y la dentro de sus negocios. Sin duda, la aceleración de los cambios tecnológicos ha generado nuevos estímulos para que estas grandes compañías se interesen en trabajar con los emprendedores y mirar con apetito a las start-ups.

Fenómenos como Netflix, Amazon, Airbnb o Uber en el mundo llevaron hace no mucho a repensar la manera tradicional de hacer negocios en los sectores más clásicos como la banca, compañías de seguros, alimentos y autos. El tema de fondo y la gran pregunta ha sido desde entonces cómo las grandes organizaciones iban a tomar estas nuevas tendencias e incorporarlas para no quedarse en el camino.

Ante ello, el ‘corporate venturing’, esta alianza entre start-ups y grandes compañías, se vuelve una fórmula que puede ser exitosa. El Programa de Desarrollo Emprendedor (PRODEM) señala que el trabajo entre ambos actores en América Latina es un fenómeno joven que ha venido en ascenso en los últimos años: unas 155 empresas trabajan con más de 2000 start-ups y lo hacen con la motivación de encontrar una vía más rápida y más barata para innovar.
Este tema fue abordado por los líderes de transformación e innovación corporativa en el CEO Summit Corporate Venturing Perú, organizado por Movistar, El Comercio y Wayra.

LAS ENCAMINADAS 
En el Perú, algunas compañías han empezado a trabajar con start-ups e innovar a diferentes escalas. Durante el Summit, los CEO del BBVA Continental, Cementos Pacasmayo, Telefónica, Saga Falabella y El Comercio compartieron sus experiencias al frente de esta revolución digital en sus compañías y los retos que afrontan.

“La innovación debe venir desde arriba, de la cabeza, y debe contar con objetivos claros antes de buscar a un socio”, apuntó Fernando Correa, CEO de Saga Falabella en Perú. Para el ejecutivo, no tiene mucho sentido tener a un socio, a una start-up, si no se tiene claro lo que se quiere cambiar. Precisamente, esta compañía adquirió en agosto a una de las líderes del comercio electrónico: Linio.
Por su parte, Eduardo Torres Llosa, CEO del BBVA en el Perú, explicó que debemos comprender la necesidad de tener emprendimientos como las start-ups. Si entendemos su valor, ya hemos ganado bastante, sostuvo.

“Nosotros nos encontramos en pleno proceso de disrupción creativa, buscando empoderar al equipo y liberar recursos para proyectos grandes. Nos falta todavía tener una visión interna de empoderamiento. Por eso, aún somos lentos para el desarrollo de productos, debido a cómo estamos organizados (por departamentos)”, indicó.
Pese a que están trabajando en ello, comentó que enfrenta dos retos grandes: barreras culturales y generar cultura de trabajo con las ‘fintech’.

PROBAR PARA INNOVAR
“De 12 o 13 iniciativas que probamos, funcionan dos o tres y debemos aprender a convivir con ese ratio de prueba y error-que es parte de innovar- para avanzar”, sostuvo Jaime Graña, CEO de El Comercio. En el caso del grupo, el ejecutivo contó que se innovó con la plataforma Pago Efectivo, que registra un crecimiento exponencial y acaba de ingresar a Ecuador. Lo mismo, agregó, sucede con Lumingo, market place que crece a doble dígito.

Desde el lado de Telefónica, Wayra suele buscar emprendimientos que ayuden al grupo a encontrar nuevos modelos de ingresos, que presenten eficiencias operativas y que sirvan de fuente de innovación, expuso Pedro Cortez, CEO de Telefónica en el Perú. En ese sentido, la compañía ha incluido a un par de start-ups (incubadas en Wayra) para dinamizar sus procesos. Coolky, plataforma de pago POS a través del celular, fue una de ellas. “Nosotros tenemos todo el proceso de recargas de Movistar con Coolky y desde octubre tendremos los pagos de la ‘app’ familia (teléfono fijo, celular, cable e Internet) con ellos”, adelantó el ejecutivo en el evento.

Similar situación ocurre con Quantico, que le permite monitorear los resultados de sus campañas digitales y que fue gravitante el año pasado durante el Fenómeno de El Niño para identificar incidencias.
El BBVA, por supuesto, también avanza en su proceso de transformación digital a paso firme. Torres Llosa contó que han trabajado con una ‘fintech’ para desarrollar la ‘app’ de Mundo Sueldo. Y, alistan una alianza con una start-up israelí para BBVA ‘wallet’, para que a través de la georeferenciación ofrezcan descuentos a los clientes según su ubicación.

En tanto, Cementos Pacasmayo se ha propuesto metas muy concretas. “Nosotros debemos ser parte de un mundo que busca soluciones, así que para el año 2030 queremos ser un proveedor de soluciones constructivas y no una compañía que vende cemento. El próximo año vamos a lanzar la primera startup que ha sido concebida por nosotros, y que operará de forma independiente”, anunció Humberto Nadal, CEO de la corporación.

Proyectó que este año, poco más del 10% de sus ventas van a ser por soluciones y que en cinco años esta cifra llegará al 50%. Respecto a su propia startup, señaló que esta volará sola, dado que por más que la compañía esté en pleno cambio, al ser una empresa grande tienen procesos que impiden la versatilidad y velocidad que necesita una start-up.

Las compañías en el Perú ya se subieron a la ola. Las innovaciones seguirán apareciendo y, seguro, más firmas irán reflejando en sus negocios los efectos de la revolución digital y el aire fresco de las start-ups.

Contenido sugerido

Contenido GEC