

Los aranceles de China sobre ciertos productos agrícolas estadounidenses- en represalia por el último aumento de las importaciones chinas del presidente Donald Trump- entraron en vigor este lunes, mientras aumentan las tensiones comerciales entre las dos principales economías del mundo.
Desde su regreso a la Casa Blanca, en enero del presente año, el presidente estadounidense, Donald Trump, anunció una serie de aranceles contra los principales socios comerciales de Estados Unidos, entre ellos China, Canadá y México, citando su fracaso en detener la inmigración ilegal y los flujos del mortal fentanilo.
China es, además, el país que presenta el superávit comercial más importante con Estados Unidos en bienes. Después de imponer un arancel general del 10% a todos los productos chinos a principios de febrero, Trump aumentó la tasa al 20% la semana pasada.
Ante esto, China reaccionó rápidamente y su Ministerio de Finanzas acusó a Washington de “socavar” el sistema comercial multilateral y anunció nuevas medidas propias. Esos aranceles entran en vigor este lunes y suponen la imposición de gravámenes del 10% y el 15% sobre varios productos agrícolas estadounidenses.
El pollo, el trigo, el maíz y el algodón procedentes de Estados Unidos ahora estarán sujetos a un cargo más alto (15%). Mientras que la soja, el sorgo, la carne de cerdo, la carne de vacuno, los productos acuáticos, las frutas, las verduras y los productos lácteos se enfrentarán a una tasa ligeramente inferior (10%), según informa AFP.

Sin embargo, los aranceles no se aplicarán a los productos que salieron antes del 10 de marzo, siempre que lleguen a China antes del 12 de abril.
Analistas dicen a la agencia AFP, que los aranceles de represalia están diseñados para dañar la base de votantes de Trump y al mismo tiempo mantener la moderación suficiente para dejar espacio para negociar un acuerdo comercial. Las tensiones comerciales entre China y Estados Unidos se suman a las dificultades que enfrentan las autoridades chinas en su intento de estabilizar la economía del país, marcada por un bajo consumo, una crisis persistente en el sector inmobiliario y una alta tasa de desempleo juvenil.
Un entorno "cada vez más complejo"
Los impuestos decididos por Washington podrían asestar un duro golpe a las exportaciones chinas, que contribuyeron en gran medida al crecimiento del gigante asiático el año pasado. Analistas dicen a la agencia AFP, que las exportaciones de China, que el año pasado alcanzaron niveles récord, podrían no proporcionar el mismo salvavidas económico para Beijing a medida que se intensifica su guerra comercial con Washington.
Mientras que expertos aseguran que los efectos completos de la reciente ola de aranceles aún no se han sentido plenamente, aunque las primeras señales ya indican una caída en los envíos. Además, estiman que las consecuencias de las medidas estadounidenses podrían no ser visibles de inmediato.
Las exportaciones de China crecieron un 2,3% interanual durante los dos primeros meses del 2025, mostraron el viernes datos oficiales, incumpliendo las expectativas y desacelerándose significativamente respecto del crecimiento del 10,7% registrado en diciembre.
“Dado que las exportaciones enfrentan un riesgo de disminución debido a la guerra comercial que se avecina, la política fiscal debe volverse más proactiva”, opinó Zhiwei Zhang, presidente y economista jefe de Pinpoint Asset Management a la agencia AFP.
Mientras continúa el pulso comercial entre Pekín y Washington, China organiza estos días las “Dos Sesiones”, su principal evento político del año que reúne a miles de delegados de todo el país en la capital.
Durante un discurso ante ellos el miércoles, el primer ministro chino, Li Qiang, presentó la estrategia económica del gobierno para 2025 y mencionó un “entorno externo cada vez más complejo”. También reveló un objetivo de crecimiento de “aproximadamente un 5%”, el mismo que en el 2024.
Según la agencia AFP, muchos economistas consideran sin embargo que este horizonte sigue siendo ambicioso en vista de las dificultades que enfrenta China en el plano económico.
“Si los gastos fiscales comienzan a aumentar pronto, entonces esto podría más que compensar el impacto a corto plazo de los aranceles en el crecimiento”, estimó Julian Evans-Pritchard de Capital Economics.
Sin embargo, dados los vientos en contra que están en juego de manera general, “aún no estamos convencidos de que el apoyo fiscal sea suficiente para lograr más que un impulso de corta duración”, añadió.
Contenido sugerido
Contenido GEC


Estos son todos los celulares que se quedarán sin WhatsApp en abril de 2025
MAG.
El significado de besar con los ojos abiertos, según la psicología
MAG.
Cheque de estímulo DOGE: ¿los beneficiarios del Seguro Social también podrían recibir el pago si se aprueba la propuesta?
MAG.
El boleto de Powerball ganador de un millón de dólares fue vendido en este local en Pensilvania
MAG.