BCR argentino hace lo posible por recuperar credibilidad

El Banco Central de Argentina (BCRA) está pagando un alto precio para recuperar su credibilidad. En menos de 30 días, ya ha gastado más de US$5.700 millones en reservas, su moneda se ha desplomado en más de 8% y ha tenido que reducir su tasa de política monetaria en 1.275 puntos básicos.

Aunque ayer, el peso se ha repuntado en 2,3%, la recuperación de la confianza de los inversionistas es incierta y las dudas han comenzado a apoderarse de los ciudadanos.

"En los mercados emergentes, cuando un banco central pierde credibilidad, nunca es una política o un alza de tasas lo que hace que la recupere", dijo a Bloomberg Alberto Ramos, titular de investigación para América Latina de Goldman Sachs.

"Lleva tiempo, es necesario explicar al mercado exactamente cuál es el plan. Aquí, parece que no hay ningún plan", comentó el jueves, luego de que el BCRA subiera su tasa en 300 puntos básicos por segunda vez, fuera del calendario de reuniones de política monetaria.

Desde que en diciembre pasado, el banco central flexibilizó su meta inflacionaria tras verse bajo presión del gobierno y, en enero, recortara su tasa a pesar del alza de la inflación, la preocupación de una política incoherente se ha apoderado de los inversionistas que, están a la espera que el gobierno tome medidas coordinadas que luchen contra la inflación y fortalezcan las finanzas públicas.

La caída del peso presionó a la autoridad monetaria a vender US$1.500 millones en un día para mitigar la apreciación de la moneda y a realizar las dos primeras subidas de tasas de política monetaria en 300 puntos básicos cada una, de forma sorpresiva. Pero las medidas no fueron suficientes para el mercado, lo que provocó que el peso cayera a un nuevo récord de 22,45 por dólar.

"El alza fue necesaria, pero parece que el mercado está pidiendo más", dijo Joaquín Almeyra, operador renta fija en Bulltick LLC.
La preocupación sobre la gestión de la inflación del banco central y la capacidad del gobierno de reducir su déficit fiscal también ha afectado el mercado de capitales argentino. Telecom Argentina postergó una venta de bonos de US$1.000 millones debido a la volatilidad del mercado.

RESPUESTA COORDINADA

El viernes, el Gobierno, algo más organizado, lanzó una nueva respuesta en coordinación con el banco central y el ministerio de Finanzas para impulsar a su moneda. Según Bloomberg, a las 9 y 33 de la mañana justo antes de que el ministro de Hacienda Nicolás Dujovne comenzara una conferencia de prensa programada, el banco central elevó su tasa clave otros 675 puntos básicos al 40%, al tiempo de reducir la tasa de encaje de los bancos de 30% a 10%.

A las 9 y 45 de la mañana, Dujovne comienza su conferencia de prensa junto al ministro de Finanzas Luis Caputo y anuncia una meta más agresiva de reducción del déficit para 2018, prometiendo recortar el déficit primario al 2,7% del PIB, frente a la meta anterior del 3,2%. Dujovne también reiteró las metas de inflación del gobierno del 15% para 2018, 10% para 2019 y 5% para 2020.

Quince minutos después, el mercado de divisas abre con una primera cotización de US$22 frente a los US$23 del jueves. A las 10 y 18, el ministro de Finanzas Caputo dice que el gobierno no emitirá más deuda en los mercados globales en 2018 y que ve necesidades de financiación de US$25.000 millones para 2019. Un poco más de una hora después, el peso se negocia en US$21,89.

El peso repuntó de las pérdidas registradas la semana pasada y los bonos en dólares rebotaron desde mínimos históricos.

Sin embargo, la volatilidad de la moneda y el crecimiento de la inflación han comenzado a afectar el bolsillo de los consumidores. "La verdad es que es preocupante porque estamos en una situación complicada en este país. A nivel familiar la comida está muy cara, aumentan los colegios, todo por las nubes, los precios...", dijo a EFE Viviana Carlezzoli, una administrativa porteña.

Carlezzoli indicó que la situación, que "influye mucho" en el día a día, "va a empeorar", aunque dijo esperar que se trate de un proceso en el que el "fin sea bueno" para que las cosas "se estabilicen en Argentina”.