Volkswagen podría recomprar miles de vehículos en EE.UU

(BLOOMBERG). Volkswagen AG podría recomprar miles de coches con motores diésel que no pueden ser arreglados fácilmente para cumplir los estándares de emisiones estadounidenses, como parte de sus esfuerzos para satisfacer las demandas de los reguladores, de acuerdo a dos personas familiarizadas con el asunto.Follow @PortafolioECpe !function(d,s,id){var js,fjs=d.getElementsByTagName(s)[0],p=/^http:/.test(d.location)?'http':'https';if(!d.getElementById(id)){js=d.createElement(s);js.id=id;js.src=p+'://platform.twitter.com/widgets.js';fjs.parentNode.insertBefore(js,fjs);}}(document, 'script', 'twitter-wjs');

Las negociaciones entre la fabricante alemana de vehículos y la Agencia de Protección Medioambiental de Estados Unidos (EPA, por sus siglas en inglés) son continuas y no se han alcanzado decisiones. Una recompra sería una medida extraordinaria que demuestra la dificultad de modificar los vehículos amañados para pasar las pruebas de emisiones.

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VW ha concluido que podría ser más barato recomprar algunos de los más de 500.000 vehículos que arreglarlos, dijeron las personas, quienes no quisieron ser nombradas porque no estaban autorizadas para discutir el asunto públicamente. Una de las personas dijo que el número de coches que podrían ser recomprados a sus dueños totaliza unos 50.000, un dato que podría cambiar mientras las conversaciones avanzan.

“Hemos tenido muchas conversaciones técnicas con Volkswagen”, dijo este jueves la administradora de la EPA, Gina McCarthy, cuando fue consultada sobre la posibilidad de que VW recompre algunos vehículos. “No hemos tomado decisión alguna sobre ello”.

CAMINO A SEGUIR

McCarthy dijo a los periodistas después de un evento este jueves en Washington que las propuestas de VW para adecuar sus coches con los estándares de emisiones han sido, hasta los momentos, inadecuadas.

“No hemos identificado una vía satisfactoria para proceder”, dijo McCarthy. La EPA está “ansiosa por encontrar un camino para que la empresa cumpla las normas”, dijo.

VW mantiene conversaciones con las autoridades estadounidenses y trabaja en una solución, dijo Eric Felber, un vocero de la compañía. No quiso comentar los detalles de las negociaciones.

Los modelos en cuestión no son los más viejos, los coches llamados Generación 1, dijeron las personas. El jefe de Volkswagen en Estados Unidos, Michael Horn, dijo en octubre que esos modelos podrían ser los más complicados de ajustar.

Los ingenieros de VW han estado trabajando en añadir un convertidor catalítico SCR a esos coches, dijeron las personas familiarizadas con el procedimiento. Esto podría significar la instalación de un tanque de solución a base de urea que, cuando se mezcla con el escape, se liga con los óxidos de nitrógeno causantes de humo para reducir las emisiones.

McCarthy tiene programada una reunión con el máximo responsable ejecutivo de Volkswagen, Matthias Mueller, a petición de él, este 13 de enero en Washington, un día antes de que la Junta de Recursos del Aire de California responda públicamente a las propuestas de reparaciones de VW. Esta semana Mueller hará su primera visita a Estados Unidos como máximo responsable ejecutivo de VW.

Las acciones crecieron 2,3% a 117,65 euros a las 9:38 a.m. en Fráncfort. Volkswagen ha perdido unos 15.000 millones de euros (US$16.300 millones) de valor de mercado desde que su admisión sobre el engaño a las pruebas de emisiones se hizo pública en septiembre.

Dos senadores demócratas estadounidenses instaron a Volkswagen a que ofrezca múltiples opciones a los clientes para compensarlos por los daños y los inconvenientes por tener coches de diésel, incluyendo una rápida reparación y dinero por la pérdida del valor de reventa y por cualquier disminución en el ahorro de combustible.

“Para los dueños que no quieren más sus coches, Volkswagen debería recomprar sus vehículos al valor justo de mercado que existía antes del momento en que la actividad fraudulenta de Volkswagen se hizo pública”, dijeron los senadores Richard Blumenthal de Connecticut y Edward Markey de Massachusetts en una carta.